La primera fase para regenerar el gran foco de lindane de Santurtzi durará un año

El pleno del Ayuntamiento de Santurtzi ha presenciado este jueves dos hitos. Por un lado, se ha dado un gran paso para descontaminar y regenerar la escombrera Etxe-Uli, uno de los mayores focos de lindane en Euskadi, que lleva décadas afectando al municipio. Y, por otro lado, todos los grupos políticos han alcanzado un acuerdo por unanimidad, algo insólito durante esta legislatura, en la que destacan las continuas rencillas entre la oposición al completo y el PNV, que gobierna en minoría. «Hoy es un día importante para Santurtzi», celebra la alcaldesa, Karmele Tubilla, tras señalar que con la aprobación por mayoría absoluta del convenio con el Gobierno vasco y URA se da un «paso decisivo» hacia la recuperación ambiental del antiguo vertedero situado a las afueras de Kabiezes.

Tal y como ha avanzado EL CORREO, el Consistorio firmará mañana con la sociedad de suelo industrial del Gobierno vasco Sprilur, la Agencia Vasca del Agua (URA) e IHOBE –Sociedad pública de gestión ambiental del Ejecutivo autonómico– un convenio que retoma el impulso para recuperar el solar contaminado de este tóxico pesticida que se filtra al arroyo Ballonti, lo que desencadenó en 1997 la primera condena penal del País Vasco por un delito ecológico.

La primera fase del proyecto, que cuenta con un presupuesto de 11 millones de euros, contempla dos actuaciones. Primero se acometerá el desvío del arroyo Molino y la conexión de aguas residuales a la red de saneamiento comarcal, ya que cruza el ámbito del vertedero y presenta valores de contaminación que superan los máximos permitidos. Una modificación que evitará filtraciones al río. Estos trabajos, que arrancarán en los próximos meses, tienen previsto una «duración de un año» dada la complejidad de los mismos, pues el solar cuenta con unas galerías subterráneas y se actuará a once metros de profundidad. Después se llevará a cabo el proyecto de impermeabilización y sellado del vertedero con el aislamiento de los materiales tóxicos y la retirada de residuos industriales para su tratamiento y depuración.

Posteriormente se llevará a cabo una segunda fase por valor de 9 millones de euros que consistirá en obras de relleno del solar. «Una vez urbanizado y dotado de infraestructura de servicios, se podrá proceder a la implantación de nuevas actividades económicas, promoviendo así la economía y el empleo, no sólo de Santurtzi, sino también de la comarca», añade la regidora.

Los grupos de la oposición, que se han congratulado de haber alcanzado una postura unánime en la presente legislatura, han celebrado este «primer paso efectivo para solucionar un problema bloqueado desde hace más de 40 años», subraya Joxi Martín, concejal de EH Bildu. «Es un día importante para nuestro pueblo», se alegra Juan Andrades (PSE), al igual que Ainhoa Lopera (Elkarrekin Podemos), para quien este acuerdo es «fundamental para proteger el entorno natural» del municipio. Desde el PP, Luis Ángel Urdiales expresa que «por fin, tras años de espera, nos encontramos ante ese convenio para descontaminar Etxe-Uli y que este vertedero deje de ser un mal sueño en la gestión de este municipio».

Por otra parte, también ha pasado por pleno –y ha salido adelante por mayoría absoluta– la concesión por parte de la Autoridad Portuaria de una lámina de agua de 185 metros cuadrados y otros 5 de superficie terrestre para instalar, en el espigón junto a la estatua de la Virgen del Carmen, un pantalán con el que «poder ofertar una infraestructura para la promoción del deporte escolar, actividades acuáticas y también el ocio saludable», recalca la edil de Deportes, Itziar Carrocera. Será una instalación decisiva para el desarrollo del club de remo, tanto en su faceta como entidad deportiva como en su labor formativa como escuela, ya que «hasta ahora el acceso por rampa para esta actividad ha limitado la práctica deportiva, haciendo que en algunas ocasiones se dependa de mareas para el acceso de manera adecuada a la ría».

Actualmente los remeros utilizan las rampas del puerto pesquero, donde los resbalones son frecuentes. Y la creación de un embarcadero especial para acceder al mar en condiciones más óptimas es una «reivindicación histórica» del club de remo, tal y como han recordado los grupos de la oposición. La instalación de esta infraestructura se llevará a cabo mediante una subvención de la Diputación por valor de más de 161.400 euros. La redacción del proyecto está próxima a terminar. Tras sacarlo a licitación, se prevé un plazo máximo de «doce meses» para ejecutar los trabajos. «Esperemos que para finales del próximo año tengamos el pantalán», remarca Carrocera.

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