Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
ALba Rodríguez
Sábado, 30 de abril 2022, 09:22
La estación depuradora de aguas residuales de Galindo lleva causando molestias a los vecinos de Sestao desde hace años. Los malos olores que emanan de la planta afectan de manera diaria a los habitantes del municipio debido a la cercanía entre estas instalaciones y el ... núcleo urbano. «Hay días que es insoportable y lleva siendo así muchísimo tiempo», explica Ruth García, que vive en el pueblo y conoce de primera mano estos malos efectos. Y es que es en estas instalaciones donde entran las aguas fecales y residuales del Gran Bilbao para su tratamiento, tarea que provoca un gran hedor. «Llevan años diciendo que se va a solucionar y nunca acaba pasando, es una vergüenza», añade la sestaotarra.
Habla de las diferentes acciones que se han llevado a cabo para intentar solventar el problema del hedor, como la de 2009, cuando el Consorcio de Aguas de Bilbao Bizkaia sacó a concurso público por seis millones de euros un ambicioso proyecto para ampliar las edificaciones que acogían los hornos y las áreas de tratamiento de fangos. Además, se sustituyó el anterior lavado químico del aire que emanaba de estas instalaciones. «No sé lo que harían o dejarían de hacer, la cuestión es que los olores siguen molestando muchísimo», subraya García, poco convencida de la eficacia de estas actuaciones.
Pero no son los olores la única queja que los vecinos tienen sobre los efectos de la depuradora, también lo son las plagas de mosquitos que cada verano asolan la zona. «Es normal que lleguen los insectos cuando hay calor, pero no en las cantidades en las que tenemos aquí durante esos meses», denuncia Igor Garmendia.
En 2019, el Consorcio de Aguas renovó su convenio con el departamento de Zoología y Biología Celular Animal de la UPV/EHU para llevar a cabo un plan estratégico integral para atajar el problema de los mosquitos. También anunciaron entonces que la presencia de estos insectos había disminuido desde 2012, logrando así una reducción del 48% de la población. «Pues será cierto y me alegro, pero sinceramente yo no lo noto, siguen molestando igual que siempre», expresa Garmendia.
Ante esta situación de descontento, el Consorcio de Aguas presentó una propuesta en el año 2019 para cubrir el reactor número 4, a modo de prueba piloto, con una cubierta de aluminio rematada por otra de carácter vegetal combinando diferentes plantas aromáticas como la lavanda. También se planeó la instalación de un sistema de aspiración y tratamiento del aire con filtros de carbón activo. La idea era probar esta novedosa solución, que nunca se había llevado a cabo en una instalación como esta en España, para acabar con los malos olores de la depuradora. Si se conseguía de esta manera una reducción considerable el plan pasaría a ser ampliar el ámbito de actuación a las otras cinco balsas que forman el tratamiento biológico. La obra salió a licitación con un presupuesto de 7,8 millones de euros, pero nunca llegó a ser realizada.
Ahora, dos años más tarde, el Ayuntamiento de Sestao solicita al Consorcio de Aguas que defina un nuevo proyecto para el cubrimiento de los reactores y acabar así con los malos olores que llevan asolando el lugar desde que se construyeron las instalaciones en los años 90. «A ver si es verdad y le ponen solución, aunque ya nos han dicho que lo iban a arreglar tantas veces a lo largo del tiempo que no me lo creeré hasta que lo vea hecho», asegura Elena Sanz, otra de las vecinas que lidian con el hedor.
El Consistorio sestaoarra realiza esta petición tras anunciarse que el proyecto presentado 2019, que además de reducir el olor en a zona también pretendía rebajar el impacto visual de la planta, tendrá que ser modificado debido a las nuevas normativas y planes estratégicos en materia energética y medioambiental aprobados en los últimos años.
Desde el Consorcio de Aguas admiten que se encuentran en este momento «trabajando en el proyecto para cubrir el reactor biológico con el propósito de adecuarlo a un dimensionamiento más integrador dentro de la actividad de la planta de tratamiento», a lo que añaden que la normativa vigente «exige un nuevo marco de referencia lo que nos obliga a que la solución adoptada sea duradera en el tiempo».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.