Santurtzi acoge un plan piloto de inserción para parados de larga duración perceptores de RGI

En el caso del pueblo marinero se han seleccionado a 16 personas que forman parte del colectivo en situación de desempleo de larga duración (doce meses en los últimos dieciocho) y beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y/o la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), es decir, aquellos que se encuentran en exclusión o en riesgo de padecerla y que, según Mendia, «en mayor medida son mujeres y mayores de 45 años». Además de ello, debían «tener interés en participar» en este proyecto innovador y «absolutamente voluntario».

Los elegidos se sumergirán en un programa de doce meses de duración en el que los dos primeros serán exclusivamente formación y el resto el Consistorio les realizará un contrato de formación en alternancia, de tal forma que el 65% de su jornada laboral será para trabajar y el 35% restante para recibir formación especializada. A lo largo de ese tiempo se desarrollarán, asimismo, acciones de orientación laboral y acompañamiento, asesoramiento e información profesional para la búsqueda activa de empleo.

En paralelo, otras 16 personas participan a través de Lanbide con un «grupo espejo» que permitirá «evaluar» la calidad de las políticas que las instituciones llevan a cabo y ver si estas necesitan algún cambio o reajuste. «Se puede observar si hay que reorientar el proyecto, que se está probando de manera adelantada a la aprobación de la nueva Ley de garantía de ingresos », ha observado Mendia. Esa dualidad también mostrará «la diferente incidencia que este programa va a tener en sus vidas».

La consejera de Trabajo se ha referido a quienes dicen que la RGI desincentiva el empleo y ha subrayado que «los hechos demuestran que cuando hay más oportunidades, cuando hay más empleo, desciende el número de personas perceptoras en disposición de trabajar». Según Mendia, este plan no trata solo de dar cobertura a quienes lo necesiten mientras lo necesiten, sino de ofrecerles oportunidades para reengancharles con el mercado laboral». En el proyecto santurtziarra los participantes rotarán entre los distintos puestos necesarios (fontanería, albañilería, pintura...) y se contará con la figura de un responsable de equipo para coordinar todas las acciones.