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El nuevo pulmón verde de Barakaldo, Zamalanda, el gran parque de más de 90.000 metros cuadrados que se está construyendo junto a la ría, en terrenos antes ocupados por Altos Hornos, podrá ser disfrutado este otoño. Así lo han confirmado este miércoles sobre el terreno, en una visita con los medios de comunicación, tanto los responsables de la obra, la sociedad Bilbao Ría 2000, como el Ayuntamiento.
Los trabajos, que se iniciaron a mediados de abril del pasado año, con un presupuesto de poco más de 7 millones de euros (sin IVA), van por tanto a buen ritmo, con los senderos ya trazados, y dando forma, entre otras cosas, a la gran zona central donde irá una gran plaza, a modo de anfiteatro, que está previsto que funcione como escenario para albergar actividades culturales. También se puede ver ya la pista de pump-track, y se están ultimando los detalles para hacer más accesible la pasarela y las escaleras que conectan con el cargadero de la Franco-Belga.
Desde hace unos días se está dando forma además al pantalán que permitirá contar en la dársena con actividades acuáticas y con una playa urbana, uno de los principales atractivos de este proyecto, y que este verano por tanto no se podrá aún disfrutar para tomar el sol o darse un chapuzón. Justo enfrente se levanta ya el pabellón en cuyo interior precisamente se gestionará la realización de las actividades acuáticas y además, según han desvelado, también contará con una cafetería con cocina, con grandes ventanales y un porche, que dará servicio a los vecinos y visitantes que se acerquen al parque.
Este gran espacio lleva el nombre de Zamalanda (campa del cargadero, en euskera) para destacar el pasado industrial de la localidad, que se recordará también con la instalación de varios hitos informativos para mantener vivo el recuerdo de lo que un día albergaron estas más de 8,5 hectáreas junto a la ría. «Recuperamos de la mano de Bilbao Ría 2000 un espacio castigado por los efectos de la industria para el disfrute de todos, un entorno histórico que pasará de dos ruidos de los martillos a los gritos de los niños que seguro que dentro de poco van a llenar este espacio de vida», ha afirmado este miércoles la alcaldesa, Amaia del Campo, destacando que éste es sin duda uno de los proyectos «más ilusionantes» que existen en la actualidad en Barakaldo.
La regidora además también ha resaltado que este parque servirá a la urbe en su búsqueda para posicionarse como puerta de entrada de turismo del patrimonio industrial de Bizkaia. «Será un gran refugio climático junto a la ría que nos va a poder permitir por fin tocar el agua. Es uno de los mejores ejemplos de la tremenda transformación que estamos viviendo», ha añadido.
Esta gran zona verde, que combinará paseos para disfrutar andando, corriendo o en bicicleta, y que tendrá zonas de juegos infantiles, merenderos y huertos urbanos, está pendiente de la plantación de unos 200 árboles, ejemplares de especies autóctonas como fresnos, castaños o tilos. El arquitecto responsable del proyecto, Ginés Garrido, ha destacado el gran esfuerzo que ha supuesto dar forma a un lugar nuevo, «con mucho valor», en unos terrenos industriales. «Había suelo contaminado, una línea de Oxinorte... Lo que hay debajo ha ocupado casi más de la mitad del tiempo a los trabajadores». Por su parte, el director general de Bilbao Ría 2000, Ángel María Nieva, ha calificado Zamalanda como «un gran espacio de oportunidad, muy potente», y ha asegurado que será «todo un éxito» para los baracaldeses.
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