El exalcalde de Sestao vuelve a la política

El que fuera alcalde de Sestao retorna a la arena política para convertirse en uno de los puntales de la formación nacionalista de cara a las elecciones forales de mayo. Concurrirá como cabeza de lista a las Juntas Generales en una de las cuatro circunscripciones en las que se divide el territorio, la de Enkarterri. El nombramiento no es baladí porque durante la última década la práctica totalidad de los 'número uno' jeltzales han ocupado tras la correspondiente cita electoral cargos institucionales de máximo nivel.

Bergara, que ha declinado hacer declaraciones, lleva apenas año y medio alejado de la primera línea. Tras ganar tres elecciones consecutivas y sumar dos mayorías absolutas abandonó por sorpresa la alcaldía de Sestao en abril de 2021 al ser reclutado por Elixabete Etxanobe para su equipo en la Diputación. La ahora candidata del PNV acababa de integrarse en el Gabinete de Unai Rementeria tras la salida de Ibone Bengoetxea.

El exregidor sestaotarra -44 años, coetáneo de Etxanobe-, no dudó. Su nueva jefa creó en el organigrama del Departamento de Administración Pública y Relaciones Institucionales un puesto de nuevo cuño expresamente para él. Le nombró director general de Administración Pública para encomendarle la relación con los ayuntamientos del territorio.

Se trata de un asunto capital para el Gobierno foral, que coincidiendo con el aterrizaje de Bergara dio un vuelco a su estrategia de internacionalización para centrarla en «lo cercano». Habían aflorado algunas críticas, incluso de alcaldes nacionalistas, sobre la financiación municipal y un supuesto trato de favor a Bilbao. Los criterios del reparto de fondos han empezado a revisarse y al director foral le está tocando mantener las relaciones con los regidores engrasadas, pero el fin de la legislatura trae cambios en sus funciones al ser reclamado nuevamente para la política activa.

La dirección del PNV vizcaíno niega que, a día de hoy, tenga nuevos planes para Bergara, pero destaca su «valía». Atribuye la designación como cabeza de lista a los afiliados, pero espera beneficiarse del tirón del exalcalde de Sestao en una de las circunscripciones donde más implantación tiene el PSE y en la que también aspirará a crecer EH Bildu. El candidato a diputado general designado por la coalición soberanista, Iker Casanova, es precisamente natural de la zona, de Barakaldo.

Siendo cabeza de lista Bergara tiene garantizada la elección como apoderado. Según lo estipulado en la norma foral que regula las incompatibilidades de los altos cargos de la Diputación, podría mantener su puesto como director general y a la vez ser juntero. Debería, eso sí, renunciar a uno de los dos salarios. Por su ocupación en el segundo escalafón del Gobierno vizcaíno percibe 85.579 euros brutos anuales, según el portal de transparencia de la institución. Los emolumentos como juntero serían sustancialmente menores.

Aunque la compatibilización es una opción viable, el camino a seguir podría ser otro. Ateniéndose a los precedentes todo hace indicar que Bergara podría dar un salto adelante en su carrera política a partir de mayo. En las dos últimas citas electorales, las de 2019 y 2015, los cabezas de cartel del PNV a las Juntas fueron Unai Rementeria, Imanol Pradales e Ibone Bengoetxea -miembros de los posteriores gobiernos forales- y Ana Otadui, que lleva esos dos mandatos como presidenta del Legislativo vizcaíno.

En esta ocasión las planchas jeltzales estarán encabezadas por Elixabete Etxanobe, Ana Otadui, Josu Bergara y Jane Eyre Urkieta, exalcaldesa de Forua, integrante del Bizkai buru batzar y juntera las dos últimas legislaturas. Algunas fuentes sitúan a Bergara en el circulo de confianza de Etxanobe tras año y medio de trabajo codo con codo, y lo consideran un aspirante «idóneo» al cargo de diputado que dejaría vacante su actual jefa si gana las elecciones. No sería un movimiento inédito: en 2019 Sergio Murillo fue nombrado diputado de Acción Social tras ocupar los años previos la dirección general de Promoción de la Autonomía Personal.