Diez murales mostrarán la diversidad de especies en el Camino de Santiago

Ahora se han embarcado en una nueva iniciativa que va más allá. La idea es divulgar la gran diversidad de mariposas que hay a lo largo del Camino de Santiago mediante la realización de hasta diez murales en otros tantos municipios para representar las especies locales. «A nivel europeo, las mariposas están en declive debido a la destrucción de sus hábitats y los herbicidas», explicó ayer a EL CORREO Urrutia, promotor de la iniciativa. Para evitar que lleguen a desaparecer, hay que cuidar el entorno. La ruta Jacobea es un lugar idóneo para sensibilizar sobre la conservación de estas vulnerables especies, ya que «este camino no es sólo un peregrinaje religioso o espiritual, sino un viaje a través de ecosistemas a nivel local y regional, así como cultural», añadió.

Las labores, en colaboración con la asociación Zerynthia -una ONG para la conservación de las mariposas en España-, comenzarían con una ruta en mayo y otra en junio como fase previa de documentación de las mariposas en distintas épocas. Después se daría inicio a los siete meses de trabajo para pintar los diez murales por todo el recorrido con la técnica del puntillismo, como se hizo en el fuerte del monte Serantes. Los lienzos se llevarían a cabo en los municipios de Pamplona, Navarrete, Ventosa, Belorado, Burgos, Fromista, Sahagún, Astorga, Sarria y Santiago de Compostela -aunque aún faltan los dos últimos consistorios por confirmar-.

Los murales, que se convertirán en guías de identificación acerca de las mariposas existentes en la ruta, medirían alrededor de once metros de largo y 2,5 de ancho, «aunque hay algún Ayuntamiento que nos quiere ceder una pared de hasta veinte metros», explica el promotor de la iniciativa. De la misma manera, se instalarán tres paneles informativos en las comunidades con gran densidad de mariposas a lo largo del camino. Entre las especies que se destacarán se encuentran la chupaleches o la medioluto norteña. Uno de ellos -los otros dos aún están por determinar- se ubicaría en los Montes de Oca, al este de Burgos.

El proyecto se llevará a cabo mediante un crowfunding, en la plataforma de Kickstarter, en la que cualquier persona, sea del país que sea, que esté concienciada con el medio ambiente pueda aportar su granito de arena. Por el momento la iniciativa, bajo el nombre 'Art and butterflies on the Camino de Santiago', lleva en el aire una semana y «avanzamos lento», señala Urrutia. No obstante, quedan tres semanas para conseguir la meta de los 28.000 euros -de los que ya se han recaudado 500-. En el caso de que el proyecto no llegue a buen puerto, «depende del dinero que se consiga, es posible que pintemos algún mural y sembremos unas bases que puedan llegar a más», explica.

Esta idea surgió a partir de una pareja proveniente de Estados Unidos que realizó hace tres años un crowfunding para estudiar las plantas comestibles que hay en la ruta Jacobea y publicar después un libro con recetas. Su propuesta alcanzó la cantidad de 18.000 euros en la plataforma y pudieron llevarlo a cabo. «Fue una iniciativa impresionante», indicó Urrutia. «Necesitamos más estrategias para concienciar sobre el mundo natural», dijo.