Barakaldo gana la batalla judicial para registrar las baldosas con chimeneas

Y es que en 2017, dos décadas después de que en la urbe se empezara a pisar sobre estos recuerdos, un creativo, José Miguel Loizaga, decidió hacer algo que no se había hecho hasta el momento, dar un nombre a esa loseta, 'La Barakaldosa', y registrar esa marca a título personal, aunque él posee una empresa dedicada al diseño. «Lo hice tomando una identificación única, para que Barakaldo tuviera un producto para representar a la ciudadanía, y dar una imagen fuera, pero se quieren aprovechar y quitarnos las ideas», ha explicado este empresario a este periódico.

Cuando presentó esta marca, con la que ha confeccionado ropa, accesorios y artículos para el hogar, y que ha cedido a la agrupación de comerciantes y hosteleros ABK, asegura que estuvo acompañado en el evento por dos representantes del Ayuntamiento. «Pero a los pocos días ya fueron contra mí y han estado emperrados en registrarla ellos para poder explotarla», ha declarado.

En los últimos años ha habido varias demandas de por medio, que el Consistorio ha ido perdiendo, rechazadas por parte de la oficina de patentes con el argumento de que el diseño de las chimeneas carecía «de carácter distintivo», pese a que se explicó en repetidas ocasiones que aludía a Altos Hornos. Una disputa judicial que se ha encargado de resolver la Audiencia Provincial de Madrid, tumbando el argumento anterior, fallando contra la oficina de patentes y marcas y resaltando que el dibujo, pese a que «no está compuesto por un grafismo excesivamente complejo, tampoco presenta tanta simplicidad como para que no podamos reconocerle cierta peculiaridad al conjunto».

Esto ha permitido al Ayuntamiento registrar por primera vez este diseño, pero únicamente para tres usos: el de materiales de construcción o baldosas propiamente dichas; el de utensilios para uso doméstico o culinario, y el de servicios de educación, formación y enseñanza. Desde el Consistorio han resaltado este martes a EL CORREO que el diseño de la loseta «nació» de su propio personal técnico, de un antiguo arquitecto, lo que les ha hecho en los últimos años «trabajar en el registro de este diseño con el objetivo de que fuese el Ayuntamiento, y no una empresa privada, quién tuviese el control, defendiendo así el interés público». «De esta manera podemos garantizar que nadie impida ni al Ayuntamiento ni a los colectivos del pueblo poder usar este diseño de manera gratuita», considerando el permiso «una gran noticia» para la urbe, «para que el diseño de nuestra baldosa pueda perdurar en el tiempo».

Loizaga, que tiene a nombre de su empresa otros diseños conocidos, como el lauburu de cuadros que se vende en las fiestas, ha asegurado que él mantiene con 'La Barakaldosa' el registro como merchandising, por lo que ABK podrá seguir sacando a la venta productos con esta marca. «Nadie le ha intentado robar nada al Ayuntamiento, lo que está sucediendo es justo lo contario», ha remarcado.