Arrancan las obras de la primera oficina de turismo de Barakaldo

Con el objetivo de convertirse en puerta de entrada del turismo industrial en el territorio, Barakaldo acaba de iniciar las obras para poder disponer de su primera oficina de recepción de visitantes, sin contar la que de manera esporádica, en algunas ferias, abre sus puertas en el BEC. Estará enclavada en la histórica finca Munoa, ubicada en la confluencia de los barrios de Cruces, Burtzeña y Lutxana; y catalogada en 2017 como Bien Cultural en la categoría de Conjunto Monumental. En concreto se situará en las antiguas cocheras, edificio que se llegó a usar como vivienda del chófer, taller de reparación y garaje de esta villa construida en 1860, residencia de verano de Juan Echevarria La Llana, exalcalde de Bilbao. Un lugar que pasará a albergar un centro de interpretación.

«Barakaldo fue, es y será industria. Por eso queremos no solo impulsar nuevos espacios industriales en nuestra ciudad, como la plaza Pormetxeta o el parque empresarial de Burtzeña, sino también recuperar y poner en valor nuestros vestigios, nuestro patrimonio más visible», ha indicado este miércoles Gorka Zubiaurre, concejal de Turismo. La rehabilitación de este inmueble, para la que se ha estimado una duración de nueve meses, se llevará a cabo gracias a una inversión de 870.000 euros, procedentes de los fondos Next Generation. Forman parte de una subvención de 2,2 millones recibida por parte del Gobierno vasco, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea, que está permitiendo otras actuaciones en la zona, como el ascensor en la parte baja de Burtzeña que mejora la accesibilidad del entorno de la finca.

Con estos trabajos el Ayuntamiento creará un edificio de información turística sobre el municipio, que contará con dos plantas, distribución que ya tiene en la actualidad. En la inferior, donde antiguamente entraban los vehículos al garaje y al taller, estará la oficina de atención a los visitantes, con unos aseos para dar servicio tanto al propio inmueble como al parque, además de un almacén. En el piso de arriba se habilitará una sala polivalente, para realizar exposiciones, conferencias y reuniones, y habrá otro espacio para llevar a cabo experiencias virtuales, que permitirán descubrir cómo era la finca Munoa y Barakaldo hace varias décadas.

«En su día fuimos entrada del empleo industrial y ahora queremos poner en valor los diferentes elementos que tenemos, como la ría, los cargaderos de mineral, esta finca, el museo de la Orconera... Tenemos un potencial tremendo para ser la puerta de entrada de todas esas personas que recorren los municipios descubriendo su pasado industrial, y vamos a apostar por aprovechar la oportunidad», ha afirmado Zubiaurre.

Además de crear este nuevo espacio, que espera estar en funcionamiento en 2025, esta rehabilitación tratará de mantener todos los elementos originales que puedan recuperarse. En el caso de que no sea posible, como sucederá con las vistosas baldosas hidráulicas de la zona del vestíbulo, serán reproducidas en un taller y colocadas en la zona central del área de información al público.

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