110.000 euros de multa por no arreglar las rampas mecánicas de Portugalete

A la empresa, que tiene «problemas organizativos que les corresponde a ellos subsanar», se le ha solicitado en diversas ocasiones que «nos designen al responsable comercial para la realización de los presupuestos del mantenimiento correctivo y de la facturación, porque a día de hoy no tenemos ese referente», ha explicado Pesquera. Además, el Consistorio ha pedido que cumplan con sus obligaciones, un plan de actuaciones correctivas para este año y que se haga una asignación de personal de mantenimiento preventivo «de forma estable, necesitamos que tengan gente que atiendan nuestros elementos». El edil socialista ha revelado que la firma ha alcanzado un acuerdo con un instituto de Formación Profesional del entorno, que aportará graduados con la capacitación requerida para atender estas instalaciones. «Creemos que es bueno y necesario», celebra.

En contra de lo que el contrato actual establece, por el que es la propia empresa quien debe informar al Consistorio de las averías de las rampas, ha sido la propia institución municipal quien ha tenido que supervisar «día a día» los elementos y trasladar esa información a la compañía. Ante la situación, el equipo de gobierno ha contratado un servicio de inspección técnica de las instalaciones para conocer su estado real. Los datos servirán para crear los pliegos de una nueva licitación, que se hará a finales de año, cuando se vence el contrato actual. «No haremos el último año de prórroga que el contrato en vigor nos da la posibilidad». En los pliegos se implementarán cláusulas y condiciones para evitar en la medida de lo posible repetir las problemáticas de los últimos años.

Por otra parte, y de cara a mejorar la situación en la calle Vallecilla, donde los vecinos denunciaron llevar casi dos años con las rampas mecánicas rotas, el Ayuntamiento está tramitando el proyecto de sustitución de los cuatro tramos por «46.283 euros». Cuando se instalaron los actuales, se apostó por unos «elementos novedosos que no han dado el resultado esperado desde el principio», por lo que se sustituirán por otros «comprobados que no darán los problemas» que han dado estos, ha explicado Pesquera. Por el momento se desconocen plazos. Con respecto a la decena de rampas averiadas de las 32 existentes en la villa, la empresa encargada está procediendo estos días a su arreglo.

Cabe destacar que uno de los mayores problemas del mal funcionamiento de las rampas y ascensores es el «vandalismo», ha recalcado el concejal de Obras, quien apela al «civismo» para evitar estas situaciones, pues «genera problemas muy importantes y daños cuantiosos», además de la molestia que genera en la ciudadanía. Y es que el proceso de reparación se puede alargar de dos semanas a un mes, como mínimo. Por ello, en cuanto a los elevadores, se ha requerido instalar elementos antivandálicos.