Una pasarela permitirá ver de cerca las obras de rehabilitación de Punta Begoña

Se nota la ilusión al arrancar una fase en la que el público empezará a ver los resultados poco a poco, incluso desde el exterior. «Vamos a devolver a la vida un proyecto abandonado durante un fuerte período de tiempo para que lo disfrute la ciudadanía», valora Gonzalo Arroita, que colabora en el proyecto desde la cátedra Unesco y que ya tiene la experiencia de la rehabilitación científica llevada a cabo en la gazteiztarra catedral de Santa María.

Uno de los efectos de esta nueva etapa en las labores de recuperación es que se multiplicarán las actividades culturales para poner en valor este edificio centenario. Acogerá conferencias, alguna actividad de Getxophoto, espectáculos de teatrales de pequeño formato o una exposición de mujeres escultoras sobre estas preciosas galerías. «Serán actividades de mínima incidencia más orientadas hacia presentaciones», avanza Arroita, quien recuerda que la finalidad social que se le quiere dar al edificio está inspirada en su origen: «En sus inicios fue un espacio de ocio, de divertimento, que ahora se recuperará para toda la población».

Las labores de rehabilitación en las que toman parte 67 expertos comenzaron por el tejado. Se trataba de impermeabilizar la terraza superior, sobre la que se asientan los jardines, para frenar la entrada de agua y la generación de humedades. El resultado, una vez acabada esta fase de las obras y solucionado un grave problema, «nos permite trabajar en la fachada y el salón», explica María Peraita, arquitecta especializada en restauración y gestión patrimonial encargada de coordinar el proyecto.

Eso enriquecerá las visitas porque se actuará en la galería sur, situada en la zona ajardinada, con vistas a Arriluze y la más próxima a los palacios de Neguri. Actualmente se está desescombrando este espacio, unas tareas se prolongarán durante todo este año. Los expertos han pensado en el visitante para instalar en ese punto en cuestión de días una pasarela provisional que discurrirá muy cerca del muro exterior. Mejorará la vista general del público de todo el interior y del desarrollo de los trabajos. «Pocas obras gozan de una visualización abierta como Punta Begoña. Fue un proyecto innovador en su creación y lo es en su restauración», resalta Arroita.

También se arrancar la fase de la carpintería del salón, una labor prácticamente de «artesanía» en la que «hay que ir al mínimo detalle», incide Peraita. Previamente, en 2015 se hizo un trabajo minucioso al escanear con láser ese espacio para realizar una reproducción visual en tres dimensiones. Detrás de la recuperación científica hay especialistas de gran nivel, como Mikel Landa, un arquitecto especializado en trabajos en madera que fue parte clave la recuperación de las Salinas de Añana.