

Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
jon ander goitia
Viernes, 9 de octubre 2020, 23:03
Es la pata más importante de la mesa, sin ella el proyecto se cae. Pero de salir adelante, será la llave que permita completar la regeneración urbanística de la zona de Lamiako que arrancó en 2004. Que el plan tome una u otra dirección depende de una condición: soterrar el metro entre las estaciones de Lamiako y Leioa. Eliminar esta «gran barrera», aseguran, permitiría estirar el municipio de una manera natural hacia la zona sur.
¿El motivo? Doble. Al otro lado de las vías se proyecta levantar nuevas viviendas sobre la antigua zona industrial. Dentro de esta parcela están, entre otros, la fábrica MISA, que se derribó en abril, y las cocheras de Euskotren, que cambiarían de lugar. Junto a eso, la transformación integral de la zona también llegaría hasta la dársena de Lamiako. La idea es convertir esta zona natural en un enorme parque, un pulmón verde. De manera que, ya sin «muros», se conseguiría conectar el barrio con estas dos zonas.
Pero que esa 'puerta' se abra dependerá del Consorcio de Transportes de Bizkaia, titular de la infraestructura ferroviaria, y de Eusko Trenbide Sarea, órgano competente del Gobierno vasco. Ambas instituciones deberán decidir sobre la ocultación de los 1,3 kilómetros de vía en el exterior que parten en dos el barrio. Aunque el plan obligará a realizar más reajustes en el mapa. En paralelo a la red ferroviaria avanza el río Gobela, que redirigiría su rumbo para desembocar en la ría.
Este ambicioso proyecto echó a andar hace dos meses, cuando Ayuntamiento y las sociedades mercantiles Geslur XXI, Urrutirena XXI y Explotaciones Inmobiliarias Lamiako (todas ellas propietarias de los terrenos) firmaron un convenio –al que ha tenido acceso EL CORREO– para fijar las bases del cambio. Aunque todo nace hace dos años, cuando las partes implicadas pusieron sobre la mesa la idea de apostar por mejorar y revitalizar el entorno del barrio.
Desde el Ayuntamiento, conscientes de la importancia de soterrar el metro para que se siga avanzando, empujan a los titulares de la red ferroviaria para que den luz verde a la obra. Para ello, se ofrecen a «colaborar» firmando con ellos «cuantos acuerdos y convenios sean necesarios» para acometer los trabajos y «participar económicamente» en los mismos. Son conscientes de que se presenta «una oportunidad histórica para desterrar una auténtica barrera física y social», remarcan.
Este último punto, sin embargo, no tendrá un impacto directo en las arcas municipales. Se empleará para ello el aprovechamiento urbanístico de la construcción. ¿Cuántas viviendas se levantarán? Las incógnitas por ahora son varias, primero habrá que modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para convertir la zona en residencial.
Este cambio podría demorarse «tres o cuatro años», lo que arrastraría consigo al resto del proyecto. «No se prevé que sea realidad a corto plazo, más bien a medio», informan fuentes municipales. Lo que sí está claro es que las zonas verdes serán protagonistas una vez consumada la transformación. Porque uno de los objetivos es que el entorno sea «amigable».
Y eso pivotará sobre el enorme parque que se proyecta construir en la dársena de Lamiako. El Ayuntamiento recibirá este terreno como cesión por el proyecto urbanístico y la idea es transformarlo en un pulmón verde. Sobre él se proyecta crear un entorno con caminos y zonas de ocio que se sumaría a otros como Artaza, Pinosolo o Errekalde. Por una parte de este parque transcurrirá el nuevo camino que hará el río Gobela y en la zona más próxima a la carretera de la ría se trazará un bidegorri.
Por el momento no hay fechas para poner en marcha este cambio. De llevarse finalmente a cabo se completaría la regeneración urbanística en Lamiako que arrancó en 2004 con el Plan Especial de Reforma y Rehabilitación Interior (PERRI) del barrio con nuevas viviendas y que continuó con la transformación del terreno, actualmente abandonado, de las antiguas fábricas Earcanal, Lan y Alesa en una zona de viviendas con un bulevar. Estos tres proyectos buscan rejuvenecer Lamiako.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El PRC elegirá en primarias al sucesor de Miguel Ángel Revilla el 4 de mayo
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Favoritos de los suscriptores
Pastillas, cadáveres en habitaciones distintas... la extraña muerte de Gene Hackman y su mujer
Oskar Belategui | Mercedes Gallego
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.