Gorliz eliminará diez puntos negros para acabar con la inseguridad en el municipio

El Consistorio ejecutará así uno de los objetivos del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que establece que se deben suprimir los espacios «conflictivos» de la ciudad para favorecer «la seguridad en el disfrute de los lugares públicos» desde una perspectiva de género. En total, son diez los puntos identificados como inseguros en base a la información analizada en los procesos participativos y en las «reclamaciones y quejas ciudadanas».

El Ayuntamiento mejorará la red de alumbrado para garantizar la iluminación en dichos emplazamientos y evitar zonas que puedan suscitar incomodidad a la población. En este sentido, atenderá especialmente aquellas áreas en las que haya aparcamientos públicos o vegetación. Por ejemplo, actuará sobre el parking situado detrás de la iglesia, junto a la casa consistorial, donde además de estacionar los vehículos el personal municipal, también lo utilizan los vecinos. Este enclave tan solo tiene iluminación en la zona norte, dejando el lado contiguo al inmueble totalmente a oscuras.

También pondrán el foco en la playa, sobre todo en la rotonda de Itsasbide, por la que transitan miles de ciudadanos durante la época estival. Afirman que en este espacio es necesaria «la colocación de una nueva línea que alumbre la acera izquierda al no existir farolas». En los aledaños están situados unos baños públicos y un extenso aparcamiento. Los parques infantiles de Ondargane y Argiñena, y el público de Estratakoetxe –que no cuenta con caminos trazados pero sí con bancos usados por los vecinos–, son otros tres puntos negros en los que trabajarán al comprobar que quedan «completamente a oscuras» cuando anochece. Asimismo, han detectado al menos tres vías inseguras: Gaminiz, con esquinas sombrías, y Mendieta y el cruce de Guzurmendi, donde no hay farolas en sus alrededores.