Getxo inicia el derribo del instituto de Aiboa para ubicar a la brigada de obras

El Consistorio busca trasladar a los trabajadores de la ubicación actual en el barrio de Alango, cerca del ambulatorio y la Policía Local, a Aiboa, junto al Garbigune. El plan denominado 'Aiboa Berri' permitirá trasladar de paso los archivos municipales de la parte soterrada del edificio Consistorial, que tiene humedad. Además, la operación dará una solución al antiguo instituto Getxo 2, que lleva más de una década cerrado. El inmueble ha sido okupado en numerosas ocasiones, ha sufrido incendios en su interior, pero además el edificio no está correctamente asentado porque el terreno se desliza.

El traslado se está alargando en el tiempo y lleva varios años de retraso la construcción. La idea del Consistorio era realizar «por fases» el proyecto de demolición. Lo primero que se pensaba ejecutar era la retirada del arbolado, pero no ha podido ser. Según ha explicado la responsable de Contratación, Janire Ocio, el proyecto de derribo, con un coste de 95.394 euros, se dividió en tres partes y quedó desierto el apartado relacionado con el traslado de las plantas. «Hay dos empresas interesadas y al costar 12.000 euros se podrá adjudicar con un contrato menor», ha comentado la edil.

Mientras se demole el edificio, los técnicos irán seleccionando los distintos materiales constructivos. La idea del Consistorio es aprovecharlos en la futura edificación. La institución local contará con la asesoría de la sociedad de Gestión Ambiental del Gobierno vasco IHOBE. Durante los últimos meses el Consistorio ha contratado a una ingeniería para que llevase a cabo la asistencia técnica del proyecto de cimentación y la dirección de obra.

El Colegio de Arquitectos recurrió el año pasado el concurso de derribo del instituto por considerar que se «restringía los principios de concurrencia e igualdad». EH Bildu ha denunciado en varias comisiones los distintos retrasos que soporta la actuación. Desde el grupo municipal del PP, por su parte, se oponen al derribo porque consideran que podría utilizarse para «usos más interesantes como un centro de mayores que preste servicio al barrio de Neguri». Ocio, sin embargo, recordó que «no se pueden mezclar los usos, esto era industrial y a ello se suma además el problema de la cimentación y la aluminosis. Todo ello hace imposible mantenerlo en pie», aseguró.