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Paso atrás en la vuelta del servicio de metro entre Urduliz y Plentzia. Según ha podido saber EL CORREO, este seguirá interrumpido. No se retomarán por lo tanto este miércoles los viajes, tal y como estaba previsto. Y por el momento su regreso sigue ... en el aire ya que no se han puesto fechas encima de la mesa. El último informe, imprescindible para restablecer el servicio, no ha sido favorable. Según se esgrime en este documento, recomienda un estudio en profundidad para conocer el estado de la ladera. Habrá que esperar a nuevos informes que avalen la vuelta al servicio.
En el calendario se había fijado este miércoles como posible fecha para subir de nuevo la barrera al servicio, que seguía aparcado. El fuerte desprendimiento ocurrido hace una semana en la ladera por la que circulan las unidades del suburbano para conectar ambas estaciones obligó a cortar el servicio. Metro Bilbao insistió en que la red ferroviaria no se había visto afectada, pero que actuaría para reforzar la seguridad de la zona. Pues bien, el metro no ha conseguido superar ese examen.
Y el motivo se encuentra ajeno a los trabajos realizados por Metro Bilbao, ya que el informe fija la mirada en el estado de la ladera. El lunes varias unidades del metro circularon a diferentes velocidades por la zona para garantizar que las vías no se habían visto afectadas. La prueba era crucial para dar luz verde a la vuelta. Sin embargo, habrá que esperar. El informe echa para atrás el regreso hasta conocer el estado de la ladera. Unos trabajos que, señalan desde metro, son ajenos a los trabajos realizados hasta la fecha en las vías.
Eso trabajos sobre terreno -arrancaron en la jornada del miércoles- se prolongaron hasta el domingo. La lluvia finalmente no retrasó la tarea y los operarios se centraron en «asegurar» y «reforzar» la red ferroviaria. Se han colocado para ello varias vigas verticales para 'blindar' el tramo. La lupa está puesta sobre los once metros que se asomaron al abismo tras el colapso de parte del monte.
Un escenario que, sostienen desde Metro Bilbao, no puso en peligro a los viajeros. «Ni la catenaria, ni los postes verticales se movieron un centímetros, no hubo problemas de seguridad. De haber afectado, los trenes se hubiesen detenido«, justifican sobre la jornada del martes en la que, ya con la ladera caída, el metro siguió circulando por este punto hasta que se decidió suspenderlo, según dictó un geólogo.
El lunes era la fecha clave antes de dar ningún paso adelante. Varios trenes pasaron a diferentes velocidades por este tramo para garantizar que no se registran fallos ni alteraciones en el firme. Se recabaron datos de esta prueba y a lo largo de la mañana de hoy se han estado estudiando. Su conclusión es que habrá que esperar.
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