Arrancan las obras de 33 VPO de alquiler en Sopela, las primeras prefabricadas de Euskadi

Un nuevo modelo de construcción aterriza en Sopela para levantar 33 viviendas de protección social en régimen de alquiler en el sector de Asu. Los trabajos ya han arrancado mediante un sistema de módulos prefabricados, de manera que sobre el terreno la promotora solo tiene que ensamblarlos para rematar el proyecto. «Este es un paso más para dar respuestas concretas al déficit de pisos que hay en el municipio desde hace varios años», remarcó ayer la alcaldesa Guruzne Carrasso durante la visita que inauguraba la obra. También recordó que «hace un año se inició la construcción de 24 VPO en régimen de alquiler en Loiola que se suman a esta urbanización de Asu y las previstas en Abaro y Ripa». La promoción en marcha cuenta con dos pisos destinados para personas con movilidad reducida, ambas con dos dormitorios. De los 31 restantes, 6 contarán con un dormitorio, 21 con dos y otros 4 con tres habitaciones.

Este proyecto es la primera experiencia de Euskadi en la que se ha incorporado esta técnica de módulos prefabricados en grandes edificaciones. El proceso que rodea a esta construcción se aprovechará para redactar un 'Libro Blanco de Edificación', un manual de estilo. El documento –cuya publicación está prevista en noviembre– «sentará las bases a las que deberán ajustarse todos los bloques que, siguiendo este patrón, se levanten en el futuro en la comunidad autónoma», explicó el director general de la sociedad pública Visesa, Carlos Quindós.

En la visita de ayer, el consejero vasco de Vivienda y Agenda Urbana, Denis Itxaso, destacó el acuerdo con el Ayuntamiento para rebajar la fiscalidad, sobre todo el 95% del Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO), y otorgar la bonificación máxima establecida en Ordenanza Fiscal de tasas por servicios urbanísticos, licencias de obras y otros servicios técnicos. El presupuesto estimado para la obra es de 6,6 millones de euros.

La gestión de todas las viviendas estará a cargo de Alokabide y se priorizará el acceso a personas que, cumpliendo con los requisitos de renta, lleven como mínimo tres años empadronados en la localidad.

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