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El ladrón robó en la vivienda de Pedro las joyas de su mujer fallecida, entre ellas una cadena, un alfiler, una pulsera y un reloj. «Se ha llevado hasta los dientes de oro con las fundas», se lamenta su hija. El atestado se encuentra ya ... en el juzgado, donde se está realizando una valoración pericial del botín del robo. A la familia lo que más le duele es que este trabajador se haya aprovechado de la vulnerabilidad de personas mayores. «Todo lo que tiene se lo ha ganado él. Son los ahorros de toda una vida de trabajo».
El padre, autónomo y lúcido, «se encuentra en estado de shock». Cuando su hija le contó lo que había pasado, estas fueron sus palabras después de soltar un juramento: «Me vengo aquí pensando que voy a estar seguro y me pasa esto. Espero que el juez tenga en consideración que esta persona se ha aprovechado de ancianos».
La familia ha interpuesto dos denuncias, una por el robo en la habitación de la residencia y otra por la sustracción en la vivienda. Y se presenta como acusación particular en el proceso judicial que se ha abierto contra el acusado.
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