La jueza procesa a la pareja acusada de matar a 'Josetxu' y secuestrar a otros dos hombres

A los dos primeros sospechosos se les imputan un total de doce delitos a cada uno, entre ellos homicidio o asesinato, robo con violencia e intimidación, detención ilegal, amenazas de muerte por intento de extorsión a la familia de una de las víctimas y estafa por la venta del coche de 'Josetxu' a un hombre ajeno a la causa. Además, podrían ser también incriminados por un delito de pertenencia a organización criminal y otro de tenencia de armas prohibidas. En el registro del taller de Pedrola, localidad zaragozana donde la pareja residía, se localizaron una táser y una pistola sin licencia, con las que emitieron descargas eléctricas a uno de los secuestrados y amenazaron a otro.

Al tercero de los presuntos implicados solo se le relaciona con el primer asalto, registrado el 26 de julio de 2019, ya que días después, el 6 de agosto, ingresó en prisión para cumplir condena por un delito anterior y no pudo estar presente en los otros dos raptos, perpetrados ya en septiembre. El hombre prestó declaración recientemente por vídeoconferencia desde la cárcel ante la jueza instructora y reconoció ser la persona que extrajo dinero en un cajero automático con la tarjeta del primer hombre asaltado, aunque aseguró que se la había dado su amigo Mohamed y que desconoce cómo la consiguió. Aunque admitió que conocía tanto a este imputado como a Hedangeline (aparecía en varias fotos con ellos colgadas en Facebook), se desvinculó de la banda y del robo con violencia.

La jueza da por hecho que en el segundo caso, perpetrado el 4 de septiembre, dos días antes de que atraparan a 'Josetxu', participó «una cuarta persona», aunque no ha podido ser identificada. El hombre consiguio escapar, pero fue perseguido, alcanzado y golpeado por la pareja. Según el testimonio de la víctima, «apareció otra persona en un coche cuando ya estaba embridado, amordazado y encapuchado». Le sonsacaron el pin de su tarjeta de crédito y los teléfonos de sus familiares, anunciándole que pedirían un rescate por él». Le robaron sus pertenencias y documentación y le condujeron a una nave en el maletero. Como no tenía fondos en sus cuentas, amenazaron al hombre para que llamase a su familia para pedir dinero y como insistía en que no tenía, la acusada llegó a anunciarle que le iban a tirar al río.

El secuestro de 'Josetxu' fue el único que terminó con su asesinato, probablemente porque ofreció «resistencia», apunta la magistrada. Todos los asaltos siguieron un mismo 'modus operandi'. Hedangeline contactó con las víctimas a través de la red social Badoo y «mediante engaños», prometiéndoles mantener con ellos una relación, les atrajo hacia la zona de Pedrola y alrededores. Les citaba en lugares aislados en Luceni y Gallur, que previamente había acordado con Mohamed y los otros miembros de la banda. Una vez allí, les asaltaban y despojaban de sus pertenencias.

Según el auto de procesamiento, el cuerpo de 'Josetxu' «presentaba dos grandes focos contusivos, traumatismo craneal y torácico». Cuando pensaban que ya había muerto, pero «aún estando vivo, aunque en un probable estado de agonía, fue enterrado en el campo». Los forenses encontraron tierra en su faringe, laringe y estómago, lo que representa un «signo de supervivencia» previa al enterramiento. Falleció entre los días 7 y 8 de septiembre, cuando la pareja ya había sacado 1.500 euros de sus cuentas y había puesto su 'Mercedes' a la venta en una página de internet. Su cuerpo no fue localizado hasta el día 27 de dicho mes en una fosa cavada en la zona conocida como barranco del Salto del Lobo, dentro del término municipal de Pedrola.

El proximo 30 de enero están citados a declarar de nuevo los acusados. Hasta ahora, Hedangeline y Mohamed, que siguen manteniendo una relación sentimental, se han negado a hablar. A partir de entonces, se dará por finalizada la instrucción y comenzará la fase de enjuciamiento y el traslado del sumario a la Audiencia de Zaragoza.