«La empresa nos ha dicho que nos busquemos la vida, que si tenemos que combinar la bici con el metro o ir a pie, que lo hagamos; pero que los pedidos lleguen, aunque sea tarde». Los repartidores de Glovo y de otras plataformas de ... envío de comida rápida esperan con «preocupación» el 1 de julio. «Buena parte de la ciudad va a estar cerrada durante horas y será complicado llegar a los sitios, sobre todo a la hora de la comida».
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No serán los únicos profesionales que tengan dificultades. Ayer, todavía no estaba claro si Amazon entregará paquetes ese día en lugares como Bilbao o Getxo. Los transportistas que están a sueldo de la multinacional tienen miedo a quedarse atrapados en mitad del dispositivo. La mayoría de las empresas de paquetería no tienen reparto los sábados. «Menos mal que ese día no trabajamos porque tiene pinta de que el centro de Bilbao no se va a poder ni tocar», explica un conductor de Seur.
Los que entregan mercancía fresca a pescaderías, restaurantes o fruterías lo tendrán más fácil. «Igual hay que madrugar un poco más, pero el reparto puede estar listo para las nueve», apunta un frutero. Muchos bares han optado por aprovisionarse con suficiente anterioridad. La idea es que haya una reserva de bebidas en el almacén para evitar problemas.
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