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Mohamed B., el hombre que agredió a un ertzaina en Vitoria y le seccionó una arteria con una botella rota, ha ingresado en prisión provisional por orden judicial, según ha podido saber este periódico. El detenido ha negado los hechos ante el juez, que ha ... valorado las pruebas en su contra por los delitos de atentado a agentes de la autoridad, lesiones graves con instrumento peligroso y daños en bienes de dominio público, según el auto de prisión al que ha tenido acceso este periódico. Tanto la Fiscalía como el sindicato Euspel, que ejerce la acusación particular, habían solicitado la prisión preventiva. La central acusaba al arrestado de intento de homicidio.
Los hechos se registraron sobre las 11.15 horas del pasado miércoles, 10 de julio, cuando el agente y su compañero realizaban labores de seguridad ciudadana en un vehículo oficial con distintivos por la calle Portal de Arriaga de la capital alavesa. El investigado se encontraba sentado en una terraza y se dirigió a los policías con la expresión: «¿Qué pasa, hijos de puta?». Los ertzainas detuvieron el coche patrulla en la calle Barrenkale y pidieron a Mohamed B. que se acercase a ellos, momento en que éste cogió una botella de cristal «con actitud desafiante».
El individuo se encaró a uno de los patrulleros. Cuando su compañero le apartó para protegerle, Mohamed B. rompió la botella contra una pared y agredió al policía, que intentó defenderse levantando los brazos hacia la cabeza. El cristal fracturado provocó una herida profunda en su antebrazo, que le seccionó la arteria radial, por la que tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital de Txagorritxu, donde le intervinieron quirúrgicamente.
El agresor huyó del lugar a la carrera con la botella en la mano y se refugió en su domicilio, situado en la misma calle donde ocurrieron los hechos. Él mismo ha declarado que tiró el vidrio a la basura. El detenido, que acumula numerosos antecedentes, algunos de ellos por resistencia a agentes de la autoridad, ha alegado que fue durante la detención cuando el agente resultó herido. El juez ha concedido más credibilidad a la declaración de la víctima y de los testigos, además de a las pruebas documentales y ha ordenado su ingreso en prisión preventiva.
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