![La Policía identifica a dos de los okupas de Repélega en el acoso a una mujer en Uretamendi](https://s1.ppllstatics.com/elcorreo/www/multimedia/202006/06/media/cortadas/okupas-repelega-kpHI-RkPWEU1ijTosOXvqMbQhw8N-1248x770@El%20Correo.jpg)
![La Policía identifica a dos de los okupas de Repélega en el acoso a una mujer en Uretamendi](https://s1.ppllstatics.com/elcorreo/www/multimedia/202006/06/media/cortadas/okupas-repelega-kpHI-RkPWEU1ijTosOXvqMbQhw8N-1248x770@El%20Correo.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
En el bar El Cacereño suena bachata, no hay una mesa libre y no se habla de otra cosa. Es el epicentro de Uretamendi, a escasos metros de donde anoche una protesta vecinal logró desalojar a los ocupantes de dos pisos cercanos. El primer ... piso del número 20 y la segunda planta del 22 han amanecido tapiados y con las puertas clavadas. La Policía Municipal hace guardia en las inmediaciones y mantendrá su presencia allí durante unos días, según confirmaron fuentes municipales. Esta misma noche uno de los dos okupas ha regresado al inmueble de madrugada y, al ver a los agentes, les ha preguntado por algunos enseres que tenía en la vivienda.
A la pelea con navajas y los incidentes previos se suma el acoso sufrido por una mujer en el ascensor hace dos días. La Policía Municipal ha identificado, entre los tres presuntos autores, a dos de las personas que participaron en las últimas ocupaciones esta semana en Repélega.
Noticia Relacionada
«Varios de ellos son los de Repélega», señalan también varios vecinos de Uretamendi al unísono, vinculándolos también a esta ocupación. Se refieren a la actuación en Portugalete de un grupo de magrebíes a los que se acusa de algunos delitos y ocupaciones recientes. Uretamendi está en «alerta y preocupado» por la posibilidad de que regresen. El bloque 20 tiene el bombín del portal roto y muchos vecinos relatan «robos en las viviendas cercanas, en dos primeros y en algún otro donde entraron subiéndose en un coche». «Las peleas son continuas, broncas a gritos en árabe y esos navajazos que se han visto no son los primeros, hubo otra igual hace cosa de un mes». Otro vecino del barrio, Alberto Labrador, denuncia que «es increíble que gente con un historial de antecedentes como el suyo entre por una puerta y salga por otra». «Hay que cambiar las leyes y, si hay que gastar dinero que sea el último para mandarles a su casa», reclama. «Están en la calle y cabreados», advierte. Muchos temen que reaparezcan con una nueva ocupación. Mari Ángeles, 59 años a la espalda en este barrio, se duele de que «con lo tranquila que era esta calle cuando yo era niña y ahora estamos siempre así». Cuenta que han quitado hasta los bolardos. Varios carteles en los portales recuerdan la necesidad de «cerrar bien la puerta».
«Si les echamos de aquí irán a Betozala o al Peñascal, hay que hacer algo», claman a lo ancho y largo de este barrio obrero. «Les hemos echado. Hay que ayudar. Eso es lo mejor que hemos hecho».
Ver fotos
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.