El hospital de Cruces estrena nueva entrada principal

Las obras han tenido por objeto hacer de este espacio un lugar más accesible y amable, con el fin de convertirlo en un espacio más cercano para los usuarios. Por un lado, conjuga una imagen más institucional y, por otro, se ha buscado que la zona de espera sea más cálida, para lo que se han empleado tonos suaves.

En concreto, según ha explicado Osakidetza, durante las obras se han utilizado materiales como la madera, la cerámica y elementos constructivos de mampostería y carácter mineral para hacer de la entrada a Cruces un habitáculo más cercano y acogedor. También se ha intentado realizar un mejor aprovechamiento de la luz natural y minimizado el impacto del ruido para lograr un mayor confort ambiental.

El espacio renovado tiene una superficie próxima a los 650 metros cuadrados. Allí se aloja el servicio de atención a pacientes y usuarios, la admisión, un puesto de información y una sala de espera. También se encuentra en este lugar el vestíbulo principal del hospital, integrado en un espacio semicircular que anticipa la restaurada y singular escalera de Cruces. Según detallan desde Osakidetza, también se ha restaurado el porche exterior cubierto y se han renovado las puertas de acceso sin alterar el aspecto exterior.

El final de estas obras coincide con las de ampliación de la unidad de Psiquiatría, que eleva a 33 su número de camas disponibles, diez más de las que tenía. En una segunda fase se incrementarán hasta las 58.