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El Departamento de Trabajo y Empleo del Gobierno vasco ha decidido incrementar en un 20% la frecuencia de los servicios mínimos de Bilbobus en los «barrios altos», las líneas que carezcan de servicio de transporte alternativo y las que tengan por destino un centro sanitario. ... En todas ellas los servicios mínimos serán de un 50%; en el resto, un 30%, como hasta ahora.
En un comunicado, el Ejecutivo autonómico aclara que la ampliación «da respuesta a la solicitud de la empresa concesionaria de Bilbobus, Bilboko Hiribus Jasangarria S. L. que consideraba que se daban las circunstancias necesarias para modificar la orden dictada en abril para esta convocatoria de huelga, que ya recogía que los servicios señalados podían ser modificados por diferentes circunstancias». La empresa trabaja para determinar qué líneas o barrios se verán afectados por la modificación.
Tras atender todas las alegaciones presentadas, el área de Trabajo «ha ponderado los derechos fundamentales en juego, tanto los del ejercicio de la huelga como el de la libre circulación de la ciudadanía», u otros que son «base para el ejercicio de otros derechos fundamentales». Entre ellos cita el de «recibir la asistencia precisa para salvaguardar la vida, la integridad física, la salud, o el acudir a los centros de trabajo». Derechos, considera el Gobierno vasco, «que no pueden quedar sin la debida protección frente al legítimo ejercicio del derecho de huelga».
En este sentido, la orden presta especial atención al perjuicio añadido de quienes no viven en el centro de la ciudad. «La falta de transportes alternativos y la disminución del servicio de autobuses urbanos debido a la huelga, colocan a estos ciudadanos en una situación de desigualdad sobre el resto que, o bien cuentan con transportes públicos alternativos, o bien no viven en los barrios más alejados del centro y, por lo tanto, tienen una menor necesidad de transporte público».
Esos perjuicios se van sumando en el tiempo, tras la sucesión de distintas huelgas en el servicio, y el hecho de que la actual se prolongue ya 40 días. «No hay ningún antecedente de una huelga tan larga en el Servicio de Autobuses de Bilbao, al menos en las últimas décadas», señala el departamento, que incide en que «el fracaso en las negociaciones del convenio en mayo prolonga el conflicto».
La decisión de Trabajo ha sido aplaudida por el Ayuntamiento. «Demuestra una sensibilidad y un compromiso con la igualdad entre los vecinos de nuestra villa», se ha congratulado la teniente de alcalde y concejala de Movilidad y Sostenibilidad, Nora Abete. «Es una acción positiva que alivia la carga de aquellas personas que viven, trabajan o transitan en los barrios altos que se han visto más afectados por la convocatoria de huelga», ha manifestado.
Sin embargo, Abete ha querido expresar también su «deseo sincero de que se alcance una solución al conflicto lo antes posible porque nuestro objetivo es siempre prestar un servicio de transporte público eficiente y de calidad que satisfaga las necesidades de todos los bilbaínos y bilbaínas».
Por su parte, el sindicato ELA, que dirige el comité de huelga, ha anunciado que interpondrá un recurso contra la nueva orden de servicios mínimos. Sostiene que los argumentos esgrimidos por el Gobierno vasco son «un despropósito» y cree que la «negativa constante de empresa y Ayuntamiento» de vincular los salarios al IPC es «una decisión política». La central asegura que «seguirá movilizándose» hasta garantizar el poder adquisitivo de la plantilla y acabar con la «precariedad de los contratos al 62% de jornada».
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