Àngels Barceló: «Seguiré siendo de San Sebastián con la misma discreción»

En su mensaje, la comunicadora no alude en ningún momento al premio ni a la polémica generada en San Sebastián por su concesión, sino que se limita a explicar que nació en Barcelona, pero se siente de muchos lugares, como «Murcia, Almería, el Priorat, Alcaufar en Menorca, Cabrera de Mar o Madrid». En esa lista también está la capital donostiarra, a la que afirma que seguirá ligada como «siempre».

«Uno es de donde están sus miedos, sus esperanzas, sus complicidades, su gente, su vida de mil maneras», ha afirmado Barceló. «Por eso, soy también de San Sebastián, porque mis miedos han estado en esa ciudad y también la esperanza», ha indicado la periodista.

«La esperanza que sentí una mañana de domingo en la Concha, esperando a Odón Elorza, cuando ETA anunció esa tregua frustrada, esa misma mañana que una mujer entre el público rompió a llorar por la emoción. La misma esperanza que sentí cuando subí corriendo al Palacio de Aiete porque ETA había anunciado el fin de la violencia. La misma complicidad como cuando le hablé a todo el mundo del Festival de Cine, de lo mucho que hacen los creadores en esa ciudad, de cómo se podría convertir en capital de la cultura. O la misma que siento, y seguiré sintiendo cuando compro chistorra o kokotxas en La Brecha», ha relatado.

El galardón se queda desierto

Barceló ha remitido un mensaje grabado al programa La Ventana de Euskadi de la Cadena Ser tras una candidatura que fue presentada por los representantes de las entidades privadas de San Sebastián Turismo y recibió el apoyo del PSE-EE, pero despertó las críticas de la oposición, que consideraba que la periodista no reunía los méritos suficientes para recibir el galardón.

En el pleno que debía ratificar la decisión, el PNV, socio de gobierno de los socialistas, ha optado por abstenerse, por lo que el premio no ha sido confirmado.

El portavoz del PSE-EE, Ernesto Gasco, ha pedido que no se votara la propuesta porque la propia Àngels Barceló le comunicó ayer que renunciaría a recibir el Tambor de Oro si no existía consenso en San Sebastián, que finalmente ha dejado desierto el galardón.