ester requena
Jueves, 21 de enero 2016, 01:13
Hace unas semanas se anunció que se había alcanzado la fumata blanca en la Casa de Alba. La herencia de Cayetana, fallecida el 20 de noviembre de 2014, por fin se terminaba de repartir tras los tiras y aflojas en el seno de la familia. ... En especial en lo referente a Alfonso Díez. La paz se ha sellado en el clan aristocrático y el viudo, de 65 años, se embolsará dos millones de euros en cinco pagos en los próximos años. Una cifra que se suma a la pensión de unos 2.000 euros que cobra como funcionario jubilado del Estado, según adelanta la revista Hola.
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Con este dinero, Díez podrá vivir sin agobios, un tema que preocupaba especialmente a la duquesa de Alba. Y ya tiene en lo que gastarse un pico de este legado: se mudará a una casa más grande, dejando así su pequeño piso de Madrid al que volvió tras los tres años de matrimonio con Cayetana. También mantendrá la casa de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), que le animó a comprar su mujer, y dedicará buena parte de su tiempo a viajar, una de sus grandes pasiones.
Ha sido el propio duque viudo el que ha llevado personalmente las negociaciones con la familia Alba y, según dicen, no ha pedido nada más de lo que en su momento estipuló la matriarca de los Martínez de Irujo. «En este tiempo no ha habido una salida de tono ni un mal gesto», detallan fuentes cercanas a un acuerdo que, curiosamente, pasaba por confidencial.
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