Doce detenidos en Barakaldo en una operación policial contra la explotación sexual de mujeres

El despliegue, que incluyó la participación de la unidad de élite de los GAR (Grupo de Acción Rápida), causó un fuerte impacto en la localidad fabril, donde fue el principal tema de conversación durante toda la mañana. También las redes sociales se hicieron eco de lo ocurrido, cuando empezaron a circular multitud de fotografías sobre el operativo. A las 8.30 horas el Ayuntamiento de Barakaldo fue avisado de que daría comienzo la operación en media docena de localizaciones como el paseo de Los Fueros, junto a la Herriko Plaza; el cruce entre las calles Zuloaga y Francisco Gómez, en la zona centro; el entorno de El Porvenir en Arteagabeitia; o la calle Landaburu, en el barrio de Rontegi.

Más allá de la fuerte presencia policial, con hasta cuatro todoterrenos de la Guardia Civil y una decena de policías armados con fusiles y provistos de chalecos antibalas en la pequeña plaza de la calle Zuloaga, el despliegue pasó prácticamente desapercibido incluso dentro de los inmuebles en los que se llevo a cabo la operación. «No hemos oído nada. Ha sido mi mujer la que me ha avisado cuando ha salido a la calle y se ha encontrado con todo esto», detalló el vecino Manu Gómez a la salida de su domicilio.

A su alrededor, un grupo de albañiles continuaba con su trabajo y con cierta frecuencia pasaban junto a ellos para arrojar escombros. «Cuando hemos llegado ya estaban con los coches y hemos tenido que aparcar un poco más lejos», apuntaba uno de los trabajadores. Donde más impacto causó la operación fue en el bloque de viviendas cercano a la Herriko Plaza, en el que ayer a mediodía se celebró la concentración semanal de jubilados y pensionistas.

A primera hora permanecía en este lugar la unidad de los GAR, que además de subfusiles y chalecos antibalas llevaban cascos y un pequeño ariete para derribar puertas. El grupo entró en el bloque, que quedó custodiado a la salida por varios agentes, un todoterreno y un vehículo camuflado. Pasado el mediodía la Guardia Civil retiró los agentes que custodiaban la entrada de la mayoría de los portales, aunque se mantuvieron en el paseo de Los Fueros hasta las dos y media de la tarde. Entonces salieron del domicilio con dos personas esposadas y varios objetos, incluidas algunas pantallas de plasma.

Vecinos próximos al bloque de Los Fueros remarcaron que en el edificio registrado era frecuente un trasiego de personas durante la noche. En este sentido, en el bloque de Zuloaga matizaban que las luces solían permanecer encendidas también durante la noche en la vivienda investigada. Todos ellos temieron en un principio de que la operación estuviera vinculada al terrorismo. Esta inquietud se comentaba en las dos cafeterías situadas a ambos lados del bloque registrado ayer en el paseo de Los Fueros. Los trabajadores de ambos establecimientos detallaron que antes de acceder a las viviendas, la Guardia Civil accedió a sus locales para inspeccionar los baños.