Galdakao, Arrigorriaga, Erandio... ¿Por qué no hay casi alquileres en algunos municipios de Bizkaia?

La escasez de la oferta del mercado del alquiler es especialmente evidente en muchos pequeños y medianos municipios de Bizkaia. Bilbao acapara un gran porcentaje de la oferta, mientras que en otras localidades que conforman el Gran Bilbao o alrededores los posibles arrendamientos brillan por su ausencia. Basauri, Arrigorriaga, Galdakao, Erandio... poblaciones donde el número de fianzas depositadas en el Gobierno vasco no es nada desdeñable, pero cuya oferta real está en mínimos y en la que se entrometen los alquileres temporales para escapar de la nueva Ley de Vivienda.

Primera parada. Las principales plataformas ofertan media decena de pisos en Basauri. Van desde los 800 euros, solo para alquiler temporal, hasta los 1.000 por uno de cuatro habitaciones, por un máximo de tres meses. Un panorama bien distinto a los 698 euros de media que arrojaron la media de las rentas formalizada en 2023, que se cerró con 1.320 fianzas, según el informe anual del Observatorio Vasco de la Vivienda.

¿Y en Arrigorriaga? Unas cuatro viviendas en alquiler, desde los 750 hasta los 925 euros. Una renta media muy por encima de las estadísticas del Gobierno vasco a cierre de 2023, que fijaba esta cifra en 688 euros, según la estadística oficial. En total, había 308 alquileres en vigor a cierre de 2023.

Hay otros municipios donde la oferta incluso se encuentra más mermada. Etxebarri. Dos alquileres. Y a precios altos. Piden por 1.300 euros un piso exterior en Antonio Epalza y 1.490 por un ático en la calle Euskal Herria. Según los datos del Gobierno vasco, en 2023 la renta media era de 800 euros y había casi 300 alquileres en vigor.

Otro ejemplo. Galdakao, con solo un anuncio a pesar de que es una población que ronda los 30.000 habitantes y, según los datos de Lakua, contaba a cierre de 2023 con 840 fianzas depositadas. Y a un precio superor a la media oficial: 850 euros frente a 710. Es un tercer piso exterior y con tres dormitorios, pero sin ascensor.

Otro caso sangrante es Erandio, con un parque inmobiliario para arrendar prácticamente inexistente. Por ejemplo, a fecha 2 de mayo, en los principales portales inmobiliarios no había ninguna oferta para un municipio que tiene sobre 25.000 habitantes, con unas 706 fianzas con el precio medio del contrato de 741 euros a finales del año pasado.

Además de la disminución de la oferta, asociada a la nueva Ley de Vivienda por los profesionales del sector, también hay un problema por la proliferación de contratos temporales en detrimento de los de larga estancia. Algo que también se refleja en algunos de los casos de estos municipios. ¿El motivo? Las rentas por temporada, con contratos de menos de un año de duración o a fecha cerrada de entrada y salida, no debe cumplir una posible delimitación de precios en zonas tensionadas, el traspaso de los honorarios del inquilino al casero o el cambio de regulación con respecto a los okupas.

Los profesionales de las inmobiliarias aseguran que la nueva ley está provocando que muchos propietarios hayan decidido vender los pisos que destinaban a alquiler, los inversores prefieran no invertir en inmuebles para arrendar y la preferencia a convertirlos en pisos de uso turístico.

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