La Ertzaintza detiene a dos hombres por robar móviles en una fiesta de reggaeton en el BEC

La Ertzaintza ha detenido a dos jóvenes de 24 y 27 años por el robo de móviles y carteras en una multitudinaria fiesta de reggaeton celebrada el pasado viernes en el BEC. Además, investiga su participación en otros hurtos cometidos en eventos de gran afluencia. Al menos cuatro personas han denunciado haber sido víctimas de un robo esa misma noche.

Según confirmó ayer el Departamento vasco de Seguridad, los autores aprovecharon el bullicio en esa cita multitudinaria para sustraer los móviles y monederos que las víctimas llevaban en sus bolsos. Fue una de ellas quien, al percatarse de que le habían robado, puso en conocimiento del personal de seguridad lo ocurrido. Éstos, tras localizar a los dos implicados, lograron retenerlos hasta ser detenidos posteriormente por la Ertzaintza.

Al parecer, los acusados habían entregado previamente el teléfono móvil hurtado a una tercera persona, que a la vista de lo ocurrido, y requerida por los uniformados, procedió a devolverlo.

La Policía vasca está investigando si los dos jóvenes arrestados están implicados en otros hurtos llevados a cabo en eventos donde se concentra mucha gente y es sencillo cometer delitos de esta naturaleza. De hecho, hay sospechas de que existan grupos especializados en este tipo de actos delictivos.

Desde el Gobierno vasco no relacionaron directamente este caso con lo ocurrido una semana antes en el BEC, pero merece la pena recordarlo como antecedente revelador. Lo que sucedió es que durante el festival Elrow, de música electrónica, se produjo una avalancha de robos. En concreto, la Ertzaintza recibió al menos 80 denuncias por sustracción de teléfonos, carteras y cadenas.

La Policía sospecha que detrás del hurto masivo de los aparatos electrónicos y otros objetos de valor puede ocultarse una banda organizada e itinerante, ya que las sustracciones se han repetido en otras ciudades donde se han celebrado estos mismos conciertos, como Valencia y Sevilla.

El evento, que recorre el mundo y en los próximos días viajará hasta Chicago, comenzó a las ocho de la tarde del pasado sábado, día 24, en las instalaciones del Bilbao Exhibition Center, y terminó pasadas las seis de la madrugada. En la publicidad se anunciaba que la sesión iba a congregar a 10.000 personas bailando durante diez horas seguidas.

Algunos asistentes aseguraron que hubo un momento en que el suelo estaba «lleno de carcasas de móviles tiradas». Una vez que se apoderaban del terminal, los ladrones le quitaban la funda para que no pudiera ser reconocido por su dueño.

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