Entregan dos etilómetros nuevos a los ertzainas de Tráfico tras la denuncia sindical

Por norma, los ertzainas suelen utilizar unos alcoholímetros que llaman «orientativos» como primer filtro. Son más sencillos y rápidos y permiten a los policías saber si un automovilista va a dar positivo. En estos casos, deben confirmar esa tasa con el etilómetro de precisión, que ofrecerá un tique con el resultado definitivo para que los patrulleros multen al infractor o le detengan en caso de que haya cometido un delito. Se considera como tal cuando el resultado supera los 0,60 miligramos de alcohol en sangre. Sólo había dos etilómetros de precisión en toda la unidad y los llevaban los equipos de atestados.

Esta falta de medios ya se había registrado en anteriores ocasiones, aunque hasta ahora los aparatos que escaseaban eran los orientativos básicos, no los de precisión como ahora. Los agentes de tráfico tampoco tienen cepos suficientes, por lo que cuando inmovilizan un vehículo, por ejemplo, si el conductor había tomado alcohol, lo hacen únicamente «de palabra, confiando en que el infractor no mueva el vehículo».