Jorge Murcia
Sábado, 6 de mayo 2017, 10:04
Este mes se celebrará en España una nueva subasta de energía renovable, en la que saldrán a concurso la instalación de aproximadamente 3.000 megavatios de potencia para las tecnologías que más logren ajustar sus precios de producción. Se trata de una nueva ventana de ... oportunidad para un sector cuya expansión se ha visto cercenada por las reformas emprendidas por el Gobierno del Partido Popular tras llegar al poder a finales de 2011. En los últimos cinco años apenas se han instalado un puñado de megavatios renovables en todo el país, que ahora se apresta a recuperar, aunque sea en tímidos pasos, el terreno perdido.
Publicidad
Euskadi no se verá beneficiada de forma directa por este despertar de las energías limpias. Al menos, en lo que se refiere a la instalación de nueva potencia. Pero sí podrá aprovechar su enorme potencia de fuego en el terreno tecnológico e industrial, el que tienen las numerosas empresas -algunas de ellas líderes mundiales en sus nichos de mercado- que se dedican tanto a la promoción de instalaciones como a su construcción, o a la fabricación de componentes.
Se podría decir que Euskadi se queda pequeña para las renovables. El territorio sólo cuenta con aproximadamente 480 megavatios (Mw) de potencia de los 32.000 instalados en España. De ellos, 173 corresponden a la energía minihidráulica. La segunda tecnología en importancia es la eólica (153), seguida de la biomasa (71 Mw) Solar térmica (45), fotovoltaica (25), geotérmica (13) y oceánica (0,3) se reparten el resto de potencia. El País Vasco es pequeño y montañosos, características que dificultan la implantación de grandes instalaciones, que son la que al final son capaces de afrontar una mayor rentabilidad. Además, las condiciones climatológicas (con menos viento y sol que en otras comunidades autónomas) juegan en contra de la expansión de este tipo de energías.
Así, la cuota de consumo final de energía de origen renovable es sólo del 13%, mientras que la de generación de electricidad apenas sobrepasa el 6%. Pese a todos los condicionantes, el Gobierno vasco se ha propuesto un ambicioso plan de crecimiento. La Estrategia Euskadi 2030, aprobada el pasado mes de julio, contempla alcanzar ese año una cuota de renovables en consumo final de energía del 21%, y aumentar la participación de las energías limpias y de la cogeneración en la producción eléctrica hasta el 40% del total.
Objetivo renovable «muy ambicioso»
«Un objetivo muy ambicioso», reconoce Javier Marqués, director técnico del Ente Vasco de la Energía (EVE). ¿Y cómo se puede alcanzar? Pues parece difícil que a través de las tecnologías más 'clásicas' del sector, como la eólica o la fotovoltaica. El Gobierno vasco está revisando el plan territorial sectorial de la energía eólica - fuertemente contestado en su día por las asociaciones ecologistas y algunos partidos políticos- en el que se definen aquellos lugares en los que, atendiendo a razones medioambientales y técnicas, sería posible una expansión de este tipo de energía. «Otra cosa es que a las empresas les interese construir un parque aquí, porque en el resto de España seguro que hay emplazamientos más rentables», reconoce Marqués. Lugares en los que quizá pueda soplar menos el viento que en lo alto de las montañas vascas, pero donde será menos costoso montar una instalación. Y como la próxima subasta organizada por el Ministerio de Energía tendrá se realizará en base a criterios exclusivamente económicos, parece difícil que ninguna empresa apueste por Euskadi para instalar sus molinos de viento.
Publicidad
Otro tanto se puede decir de la energía fotovoltaica: el País Vasco no puede competir con otras localizaciones que gozan de muchas más horas de sol y espacio para montar grandes instalaciones, que son las que tienen todas las de ganar en este tipo de concursos.
La apuesta vasca por las renovables se dirige -al menos desde el punto de vista institucional- a energías como la biomasa o la geotermia. Tecnologías que cuentan «con un grandísimo potencial», aunque no tanto para la generación de kilovatios eléctricos como de calor. En el primer caso, a partir de residuos forestales, algo de lo que Euskadi va sobrada. La geotermia, por su parte, aprovecha el calor que emana del subsuelo.
Publicidad
El EVE subvenciona en la actualidad casi 500 instalaciones de biomasa. Parte de ellas son propiedad de industrias (por ejemplo, las papeleras) que generan electricidad a través de este tipo de residuos. Pero también hay, cada vez más, multitud de edificios climatizados con el calor que produce mediante este proceso. «Por ejemplo, el edificio del seminario de Derio, o el hospital de Gorliz, se 'alimentan' de biomasa. También la aprovechan cada vez más comunidades de vecinos, caseríos, invernaderos, etc.», asegura el director técnico del EVE.
El ejemplo de Ispaster
También hay municipios que se han enganchado a la energía verde. Como el vizcaíno de Ispaster, donde todos los edificios públicos -ayuntamiento, comedor, guardería, gimnasio, etc.- obtienen el calor de una caldera de biomasa. Un sistema que se complementará además con la energía generada a partir de paneles fotovoltaicos. El organismo público también da cobertura a proyectos relacionados con la energía geotérmica, e incluso posee participaciones en algunas empresas del sector, como la vizcaína Telur.
Publicidad
Pero si hay un lugar en el que se unen la apuesta institucional vasca por las energías limpias y su desarrollo tecnológico en industrial es el mar. El EVE es promotor de Bimep, una infraestructura de investigación de energías marinas situada en Armintza (Bizkaia). Un lugar en el que las empresas pueden realizar sus ensayos, tanto desde el punto de visa de aprovechamiento de las energía de las olas, como desde la eólica marina. O para probar la resistencia de determinados componentes a los ambientes marinos. La instalación es gestionada por Oceantek, empresa participada por Iberdrola y Tecnalia.
Está previsto que esta parte de la costa vizcaína sirva próximamente de banco de ensayos para la eólica 'offshore': se trata de probar soluciones flotantes para una tecnología que cuenta con grandes obstáculos para implantarse en costas como la española, más profundas que otras donde la eólica marina está en pleno proceso de expansión, como el Mar del Norte. Empresas como Saitek o Nautilus (participada por Iberdrola) son referencia en este campo.
Publicidad
La fuerza de las olas en Mutriku
Unos cuantos kilómetros más al este, ya en Gipuzkoa, se sitúa la planta de Mutriku en la que se genera electricidad a partir de la fuerza de las olas. Se trata de una tecnología aún en fase piloto y sus cifras de producción son aún muy modestas, pero que ya ha conseguido funcionar de manera ininterrumpida durante cinco años. «Es muy importante que las empresas tengan un lugar donde experimentar, ensayar con sus prototipos y probar nuevas soluciones», valora José Ignacio Hormaeche, director general del Clúster de la Energía, que agrupa a las principales empresas de la cadena de valor del sector energético con presencia en Euskadi. No sólo grandes promotores como Iberdrola, y fabricantes de la talla de Siemens-Gamesa en el negocio eólico. O Sener, líder mundial en el campo de la tecnología termosolar. Pero también proveedores y fabricantes de componentes como Ingeteam, Arteche u Ormazabal, por citar sólo tres entre muchas decenas.
Empresas que asisten esperanzadas a cómo el Gobierno español vuelve a abrir la mano con las renovables después de cinco años de parálisis, aunque son conscientes de que hoy por hoy su negocio está casi exclusivamente en el extranjero. «Nos interesa un crecimiento global, y en este sentido afortunadamente el mercado internacional no deja de crecer. Pero lógicamente nos gustaría tener una mayor cuota en España», se sincera Hormaeche.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.