Dominion sale a Bolsa con un valor de 450 millones, en la banda baja de su expectativa

Dominion colocará en esta primera operación de búsqueda de nuevos accionistas un mínimo del 33% del capital, si bien se ha abierto una opción para ampliar este paquete hasta el 48%. El acto formal de su debut en el mercado tendrá lugar mañana en el edificio de la Bolsa de Bilbao.

Con la valoración realizada ayer la empresa tiene ya su primera referencia de valor en el mercado, que se sitúa en 450 millones de euros. La compañía, prácticamente desconocida para el gran público, de escasa visibilidad y con un perfil de actividad muy difuso, ha experimentado sin embargo un gran crecimiento en los últimos años, sobre todo de la mano de la adquisición de empresas más pequeñas. En el pasado ejercicio facturó 525 millones de euros, con un beneficio neto de 17 millones. La firma ya ha anunciado que una parte de la colocación en Bolsa implica una ampliación de capital estimada en 118 millones de euros, que se destinarán precisamente a financiar nuevas operaciones de crecimiento.

El secreto, en la masa

Mientras tanto, Telepizza ha optado también por la prudencia máxima en su segunda llegada a la Bolsa española. La empresa que publicitó el secreto de su éxito en las características de la masa que sirve de base a las pizzas, su producto estrella, decidió ayer situarse en la banda baja de su oferta y fijar el precio de salida de sus acciones en 7,75 euros por título. Una cifra que supone valorar la compañía en unos 800 millones de euros.

Telepizza es como un guadiana bursátil. Su primera colocación se realizó en el año 1996, en una época en la que se hicieron populares las llegadas al parqué de empresas aparentemente exitosas. Telepizza protagonizó además una revalorización fulgurante, que posteriormente las cuentas de resultados reales de la compañía se encargó de moderar e incluso hundir. Desde 2007 la firma permanecía fuera del parqué, controlada por la familia Ballvé y los fondos de inversión Permira y KKR, que ven ahora la oportunidad de cubrir una nueva fase del ciclo y reducir su inversión, aunque en este caso con una ligera minusvalía.

La compañía tiene en la actualidad 1.311 tiendas -una parte son propiedad y el resto franquiciadas- y sus ventas anuales alcanzan los 329 millones de euros. El pasado año la empresa presentó un resultado ligeramente negativo, con pérdidas netas de 1 millón de euros. Curiosamente, la firma ya ha anunciado que de momento no entra en sus planes el reparto de dividendos, lo que probablemente ha influido en situar su valoración en la banda baja previamente fijada por los bancos colocadores.