El presidente de Kutxabank renuncia a 200.000 euros de la parte variable de su sueldo

El presidente de Kutxabank, Gregorio Villalabeitia, ha renunciado a percibir unos 200.000 euros brutos correspondientes a la parte variable de su sueldo en 2015. De esa forma, su retribución, que ronda los 800.000 euros anuales, se ha visto reducida en un 25%.

La medida ha sido difundida este viernes por el banco vasco a través de una nota dirigida a la plantilla, que ha sido difundida a través de la web corporativa de la entidad. En ella, el máximo responsable de la entidad explica que ha adoptado esa decisión tomado esta decisión personal por su voluntad de alinearse «con los esfuerzos de mejora de la eficiencia» que realiza Kutxabank.

Villalabeitia fue designado presidente en noviembre de 2014, tras la dimisión de su antecesor, Mario Fernández, por sus diferencias con el PNV sobre decisiones estratégicas en torno al futuro del banco vasco, como la eventual entrada de capital privado para reforzar su músculo financiero y blindar su obra social. Tres meses después, EL CORREO desveló en exclusiva que Kutxabank había elevado un 73% el salario de su principal ejecutivo, lo que generó una encendida polémica.

Con esa medida, Villalabeitia pasó a cobrar alrededor de 800.000 euros anuales. De ellos, 600.000 correspondían a su retribución fija, a la que había que añadir otros 200.000 euros en variables en función del cumplimiento de determinados objetivos. A esa cantidad es a la que ha renunciado ahora. Mario Fernández percibió 463.000 euros en su último año al frente de la entidad.

El presidente del banco vasco ha comunicado su decisión a la comisión de retribuciones y al consejo de administración, antes de anunciarla a su plantilla en la intranet.

Fuentes de Kutxabank han subrayado que «no es habitual» una reducción de en torno al 25 % del sueldo, máxime cuando este salario se sitúa «en la parte baja» del conjunto del sector financiero y es comparativamente inferior al que perciben ejecutivos de grandes empresas.

De hecho, el propio Villalabeitia tenía una retribución mayor en la empresa en la que trabajaba -como socio de Seeliger y Conde, firma líder en España en la búsqueda y desarrollo de talento directivo- antes de acceder a su cargo actual.

Las mismas fuentes han recordado que poco después de tomar posesión de su cargo, Villalabeitia ya anunció que iba a ser consecuente con los objetivos de eficiencia del banco y que habría que hacer «sacrificios».