Las voluntarias de la asociacion informaron sobre las consecuencias de esta enfermedad recientemente en Durango. (Montse Llorente: segunda por la derecha). J.G.L

«Hay que concienciar a la gente que hay ayudas y que las deben solicitar»

Montse Llorente ve «con futuro» la Asociación contra el Cáncer de Durango que preside tras nuevas incorporaciones en el grupo que se gestó hace medio siglo

Martes, 7 de noviembre 2023, 20:28

Montse Llorente lleva cinco décadas luchando y concienciando por el cáncer en la villa. Con treinta años al frente de la asociación en Durango, valora muy positivamente «la llegada de personas voluntarias» que se han incorporado recientemente para trabajar y garantizan el «relevo generacional» e ... informan acerca de esta enfermedad. «Mis inicios fueron gracias a la figura de Consuelo Losa, primera presidenta, que me animó a participar. Y el primer acto en el que me incorporé fue la cuestación. Hemos tenido unos presidentes estupendos que me han enganchado, entre ellos, Juanjo Echarte que fue fabuloso. Luego hubo un momento en el que estuvimos Marisol Azkuna y Ana Mari Piedra, ya fallecidas, y yo. Después, me tocó a mí, llevo 30 años y estoy esperando ahora un relevo», analiza.

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En la actualidad, el grupo ha registrado la incorporación de siete nuevas voluntarias el año pasado y otra más en las últimas semanas. Todas son mujeres y trabajan con mucho ahínco y empuje en la batalla contra el cáncer. En este sentido, hacen hincapié en que las pruebas para la detención precoz del de mama son fundamentales. «Nos lo están diciendo los médicos, oncólogos... La gente está muy concienciada, sabe que estadísticamente uno de cada cuatro vamos a padecer un tipo de cáncer. Pero no quiere decir que sea mortal, ni mucho menos, pero lo vamos a sufrir. Las personas se cuidan cada vez más y acuden a realizarse pruebas y revisiones asiduamente», subraya Llorente.

Desde el pasado mes, las vecinas de Durango ya pueden realizar sus mamografías en el hospital de Galdakao poniendo fin a la derivación al centro de alta resolución de Gernika. Las voluntarias de la asociaciónes apelan a que todas las mujeres acudan a las consultas cuando sean citadas «En ocasiones, puede que no sea nada lo que te detectan, pero si se enquista y envejece se agrava la situación» explica la presidenta del grupo.

Llorente entiende, asimismo, que no todo el mundo tiene la posibilidad de tener un vehículo para trasladarse hacerse las pruebas en municipios donde los medios de transporte no son del todo accesibles. «Sería todo un éxito que algún día las pruebas se realicen en Durango, pero lo veo más a largo plazo», añade Llorente.

Apoyo social y psicológico

La ciudadana valora la solidaridad de la villa a la hora de ayudar en este tipo de asociaciones. «La gente tiene mucho espíritu de colaborar y trabajar en asociaciones y una de ellas es ésta. A medio plazo, me gustaría verla como está ahora, con gente que colabora, con ánimo y quiere trabajar. No es algo diario, pero hay que estar y quien está comprometida laboralmente tampoco puede estar en ciertos momentos. Pero yo la veo con futuro, soy muy positiva», explica.

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La asociación se ha convertido en un símbolo y punto de referencia para mucha gente en estas décadas. Tienen a disposición de los vecinos de la villa un teléfono que atiende las 24 horas del día con consultas psicológicas y médicas y el que quiera también puede ponerse en contacto con el teléfono centralizado de Madrid que se llama infocáncer de la Asociación Española contra el Cáncer. Además, también ponen a disposición de los vecinos servicios de asistencia social, oncología, psicología o legal.

Las voluntarias de la asociación se reúnen una vez al mes para ver más o menos lo que pasa y lo que hay que hacer. La cuestación del 3 de diciembre es la siguiente actividad. La vecina Mariasun Canales es una de las voluntarias. «Empecé hace unos cuatro o cinco años. Comenzamos a ver que la gente venía para ayudar a personas que lo necesitan y nos animamos a colaborar y a meternos en la asociación. Tenemos sillas de ruedas, pelucas y ofrecemos consejos en forma de ayuda para personas con cáncer e invitamos a todos aquellos a que llamen a la asociación y les damos unas pautas para seguir», confiesa.

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Carla Santos lleva año y medio colaborando en esta entidad. «Llevo 45 años viviendo en Durango. Yo siempre pensaba que el día que pudiera me involucraría para ayudar a los demás. En mi familia, hemos tenido cuatro casos. Mi nuera, con 36 años, se murió y por eso siempre he pensado en ella. Hay que concienciar a la gente de que hay ayudas, que el que tenga ese problema en casa marque el teléfono y que las deben solicitar», señala.

Besi Carreto es una de las voluntarias que se ha sumado el último año. Se animó en un acto que realizó el Tabirako para ayudar a la asociación. «Me dijeron que no tenían gente joven, que hacían falta más voluntarias. Me reuní con unas amigas y nos apuntamos todas», detalla.

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