De ingeniero a pintor

«He sido chico de barrio en Ortuella y soy hijo de obreros, procedente de una zona minera y muy industrial. Comencé a trabajar en una fábrica y de ahí, me fui a la universidad y estudié la carrera. Sacaba muy buenas notas en la asignatura de dibujo industrial, se me daba muy bien. Poco después, desempeñé mi labor en una empresa de este sector. No obstante, con la reconversión industrial, se rompieron todas las empresas y con 54 años me quedé con la duda de saber qué hacer», explica Domínguez a EL CORREO.

Uno de sus 'hobbies' era dibujar y pintar y se animó a comenzar a practicarlo en 2004. «La primera profesora que tuve me dio la bendición. 'Tú, Mario, vas a pintar. Tienes un estilo propio y muy tuyo. No copias a nadie'. Y así empecé con acrílico, luego me pasé al óleo y me formé en distintas escuelas punteras de Bilbao. Y ahora también lo hago con acuarela», añadiendo que expondrá en óleo y acuarelas bajo el título 'Amorebietan argiak'.

A lo largo de su trayectoria artística, ha expuesto en Bilbao y en localidades vizcaínas como Barakaldo, Portugalete, Ortuella, Gallarta (Museo de Minería del País Vasco) y en Cantabria también, en Laredo, Santoña y Colindres. Las obras que mostrará en la localidad zornotzarra también le llena de nostalgia. «Lo mejor es que lo vea la gente, a mí lo que más me gusta es cuando los visitantes disfrutan del arte. Mis abuelos maternos eran de Durango (expondré el famoso puente de San Agustín) y Amorebieta siempre me ha tirado mucho. Además, también hago un homenaje a los derechos de la mujer en materia de igualdad mostrando a una chica brindando por sus derechos y a una mujer saharaui como símbolo de maternidad», reconoce.

Los vecinos del municipio tendrán la oportunidad de disfrutar, entre las cerca de 30 obras, el paso de la Gabarra por un río en Amorebieta o la representación de una colegiata. Otras como el Santuario de Urkiola con las peñas del Duranguesado, la Casa de Juntas de Gernika con el árbol, reflejando la destrucción que sufrió en el bombardeo y haciendo una alegoría al logo nazi son otras de las más destacadas. La zona industrial de Bizkaia, con las chimeneas de los famosos Altos Hornos reflejarán el Barakaldo de aquella época. También hará un hueco a Portugalete, La Galea (Getxo), Puerto Viejo de Algorta, el Museo de Guggenheim o el Arenal de Bilbao.

Apasionado seguidor del Athletic Club, también ha querido hacer un guiño al club de sus amores con la figura de un león. A lo largo de mi vida, dibujé el campo de fútbol del club rojiblanco de 1920 en el que aparece Pichichi con su novia o el famoso arco de San Mamés, cuadro que fue comprado por un hincha rojiblanco de Cantabria y está instalado en un establecimiento tradicional de Santoña.

Además de su faceta artística (a la que le dedica uno o dos días a la semana), también le encanta la lectura, la fotografía y la música y ha cantado en la coral de Portugalete durante muchos años. «Ahora, pinto más con acuarelas y disfruto mucho realizando retratos de mis nietos. Esta técnica es más limpia aunque más difícil que el óleo (no puedes corregir los defectos, tienes que hacerlo casi perfecto) y puedo hacerlo en casa. Hay que tener una vejez activa», confiesa este vecino que lleva cerca de cinco décadas viviendo en Portugalete.