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La vecina Sheila González (41 años), técnica superior de Realización y Postproducción de Audiovisuales, es la nueva concejala del PSE en el Ayuntamiento de la villa, tras la renuncia por motivos personales de José Ángel Orbegozo. Junto a su compañera de partido y teniente de alcalde, Jesica Ruiz, está aprendiendo todos los aspectos de la gestión municipal y apuesta por visibilizar a todos los barrios y la labor de las diferentes asociaciones culturales.
–¿Cómo afronta su primera etapa política en el Consistorio?
– Tras la dimisión de mi compañero, Jose Ángel Orbegozo, me propuso esta idea y siempre he tenido mucha ilusión de participar en la vida política y realizar actividades con los vecinos. Es un reto para mí intentar hacer lo mejor posible para el bienestar de todos los ciudadanos de la villa. Era la tercera en la lista y afronté dar este paso. Asumo el cargo con respeto y responsabilidad, pero con mucha ilusión, ganas y espíritu de servicio.
– ¿Por qué la política municipal?
– Es la que más me gusta, mucho más que la que se hace a nivel autonómico o nacional porque es cercana a las personas. Puedes ayudar socialmente a los vecinos de una forma más sencilla porque es también menor la cantidad de habitantes que puedes gestionar. No obstante, lo que detesto es la crispación que surge en función de la ideología y del partido político que representas. Estamos todos aquí para aportar y que la ciudadanía pueda vivir mejor y garantizar su bienestar. Y es algo que no se hace, porque siempre está 'el y tú más' y eso no me gusta.
– ¿Cuál es su experiencia profesional?
– Es amplia. He trabajado como camarera y encargada de una empresa de electrónica y actualmente, ejerzo de administrativa en una empresa de construcción. No obstante, tengo mucha relación con la sociedad y cultura de Durango porque he pertenecido cerca de una década a la junta directiva del centro andaluz de la localidad. Mucha gente me conoce de eso y me he esforzado para dar a conocer la cultura de esta región en la localidad, colaborando con diferentes asociaciones. He gestionado la barra del bar , y la organización de eventos masivos como la Feria de Abril que tuvo miles de visitantes. También he dado cursos, en continua colaboración con los socios. He bailado durante casi 20 años.
– ¿En qué aspecto cree que se puede transformar Durango?
– Como vecina, creo que puedo aportar muchas cosas porque conozco a una multitud de gente en el ámbito cultural, desde jóvenes a mayores y lo estoy percibiendo en estas fiestas de San Fausto. Me trasladan cosas y hay que seguir mejorando.
– ¿Cómo se pueden mejorar los barrios?
– Creo que hay muchos avances, pero hay que hacer hincapié en que todos los barrios tengan visibilidad. En mi zona, que es Astepe y los colindantes como Sasikoa estamos un poco en tierra de nadie. Tiene que haber lo mismo para todos, sin hacer diferencias. ¿Si en un barrio abres un centro cívico para los vecinos, por qué en el resto no? Es una necesidad en todas las áreas para que la gente se conozca y realice actividades. Es una forma de unir a los ciudadanos.
– ¿En qué tiene que cambiar?
– En la circulación. Tenemos que gestionarla de otra manera, hay zonas que no tienen OTA y están continuamente llenas de vehículos fijos o las furgonetas laborales y de ocio, que no se mueven del estacionamiento durante un montón de días y en los fines de semana. Es una problemática que se repite en San Fausto o mi barrio. Igual se debería extender este sistema a esas áreas.
– ¿Y en el ámbito cultural?
– Creo que se está perdiendo mucho. Antes, había más asociaciones locales. Y en el caso de casas culturales de Andalucía, Extremadura, Palencia y León que había en la villa, ha disminuido esa dinamización. El Ayuntamiento debería pedir que se hagan eventos y ayudarles a que se materialicen. Hay que dar visibilidad, ya que atrae a muchos vecinos conocer su gastronomía y cultura. Creo que hay que volver a impulsar estas actividades.
– Ha comenzado en el cargo, casi en plenos San Faustos.
– Sí, estoy disfrutando mucho. Tengo el placer de asistir a muchas actividades y la gente agradece mucho que vayas y compartas experiencias con ellos. En el concurso de tortillas, estuve en el jurado y estuvieron muy contentos, así como en la comida de mayores, donde pasas un tiempo muy agradable con ellos. Fue muy gratificante.
– ¿Con qué actividades está disfrutando más?
– Con los 'Zezenak Dira', es algo diferente en la comarca y la acogida que tiene es brutal, con una cada vez mayor asistencia de vecinos en la plaza de Santa Ana.
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