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MANUELA DÍAZ
Jueves, 10 de noviembre 2022, 20:29
Ha sido imposible el encuentro. El equipo de gobierno de Durango, formado por EH Bildu y Herriaren Eskubidea-Elkarrekin Podemos, y la oposición no consiguieron mantener la unidad en el Día de la Memoria, celebrado este jueves. Dos actos. Dos visiones de las víctimas. Y ... dos bloques enfrentados que mantienen abierta la herida de la memoria en la villa.
Por un lado, el acto oficial de la tarde, frente a la escultura en honor a las víctimas del franquismo levantada en Kurutziaga hace nueve años por Durango 1936 Kultur Elkartea que trabaja en la recuperación de la memoria histórica. Un acto solemne, marcado por el silencio solo roto por el sonido de los violines. No hubo palabras. «Es un día para el recuerdo de la memoria de todas las víctimas», dijo tras el acto el teniente de alcalde de la coalición soberanista Iker Urkiza.
Entre los asistentes, representantes del equipo de Gobierno y del PNV, la única formación en asistir a los dos eventos, si bien fue crítica con esta brecha política. «La construcción de una memoria sana y sanadora requiere que este proceso explicite de un modo solemne, oficial e inequívoco que el dolor provocado por el terrorismo, sea cual sea la organización terrorista que lo produjo, fue injusto e injustificado», recalcó el grupo jeltzale.
Horas antes, su portavoz, Mireia Elkoroiribe dirigía la ofrenda floral ante el monolito de las víctimas del terrorismo de Durango. Al acto, organizado por el PNV y que contó con el respaldo del PSE-EE, asistieron representantes de sendas formaciones, además de familiares del concejal del PP Jesús María Pedrosa; del director financiero de 'El Diario Vasco', Santiago Oleaga, y de Epifanio Vidal, entre otros, tal y como vienen haciendo desde hace quince años.
«En 2007 vimos importante realizar este encuentro que, aunque no va a calmar el dolor y sufrimiento que el terrorismo causó, es necesario retomarlo para homenajear a las víctimas como se merecen» apuntó Elkoroiribe, quien apeló a la unidad para «recordar lo que sucedió, con el fin de que nunca vuelva a suceder».
Entre el público, la portavoz socialista, Jesica Ruiz, que no intervino en el acto, recalcó la necesidad de «honrar a todos los que dieron su vida luchando para que hoy en día podamos vivir en libertad a manos de cualquiera de los terrorismos, aunque en Durango solo haya víctimas del terrorismo de ETA», señaló. Nueve durangueses asesinados.
Ruiz, criticó la intransigencia del ejecutivo a reusar asistir a la ofrenda matinal. Insiste que el monolito de Ezkurdi «es el lugar donde se debe conmemorar el día de la memoria». No obstante, según solicitó una rotación a tras un acuerdo alcanzado entre Herriaren Eskubidea-Elkarrekin Podemos, PNV y PSE para ir rotando entre los diferentes monolitos del municipio. Un pacto que lamentan no se ha cumplido.
Desde la formación morada, Julián Ríos puso el acento en la memoria. «Todas las víctimas, sin exclusión, merecen todo el reconocimiento año tras año para que tengan memoria, justicia y reparación», aseguró. En cuanto a la ruptura abierta entre los partidos quitó hierro. «No vamos a entrar en pelea», dijo. Eso sí, aseguró que si se ha optado por institucionalizar la celebración de la tarde es porque el espacio está más céntrico y se celebra a una hora en la que pueden asistir más personas.
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