Miembros de la Policía Municipal de Durango han denunciado ante el equipo de gobierno, PNV y PSE, una serie de irregularidades referentes al puesto de suboficial y a la oposición interna de plazas de atestados. El pasado mes de julio ya mostraron desde el sindicato Esan su rechazo al proceso selectivo de carácter interno, sosteniendo que un miembro del tribunal aportó presuntamente «información relevante y de forma privilegiada» a varios aspirantes.
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Según explican a EL CORREO fuentes policiales, «el cargo lo ocupa un agente en Comisión de Servicios (no con plaza en propiedad), que no superó el examen teórico de agente primero (cabo, una escala inferior)». «Es algo curioso. La persona que ocupa este cargo es delegado del sindicato mayoritario en el Ayuntamiento (ELA), y en dicho proceso cambiaron las bases en contra del criterio de la Oficial-Jefe, amoldando y dando la puntuación necesaria para que este agente obtuviera la plaza», subrayan.
Su enfado va más allá e indican que se logró modificar en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) la plaza, pasando de externa –a la que se podía presentar cualquier agente de la comunidad autónoma– a interna, donde sólo pueden concurrir miembrosa de la Policía Municipal de Durango.
Dentro de la policía hay unas plazas concretas para la realización de atestados. En dicho proceso, según recalcan las fuentes consultadas, este suboficial facilitó información privilegiada antes que se publicara, dando ventaja sobre otros candidatos a un aspirante que casualmente es otro delegado sindical de la misma central. «Es más, le envió información relativa a dicho proceso, existiendo copia de lo expuesto, porque se la envió a la vez que al tribunal, constando en copia del mismo. Además, y certificado por dicho agente, le dijo textualmente 'tranquilo, lo tuyo está hecho'», argumentan.
Al respecto, el Ayuntamiento ante las acusaciones de supuestas filtraciones en el proceso selectivo de carácter interno, recalcó que se actuó de inmediato mediante consulta a Arkaute, que había supervisado todo el proceso por petición expresa de los propios responsables de la Policía Municipal.
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«El presidente del tribunal presentó la renuncia al momento de ser conocedor de las acusaciones, y la persona que supuestamente podía ser beneficiada también renunció al proceso de selección», subraya, además de informar que se está realizando un «gran esfuerzo» en la formación de los agentes de la Policía Municipal. Este año, se han impartido el curso del programa informático Eurocop (5 días), el curso de reciclaje de tiro (2 días), el curso de Incidentes Críticos (5 días), el Curso de formación como monitor de Educación Vial (5 días), el curso básico de tiro para interinos que les habilita a portar arma (5 días), el curso de Sistemas de Retención Infantil (1 día) y el Curso de Violencia Machista (1 día, primera parte).
El disgusto de las fuentes policiales va más allá e insisten en que actualmente, y debido a una mala gestión del calendario por la jefatura actual, acumulan más de 2.400 horas extras (a la espera de fiestas de San Fausto, Euskal Liburu eta Disko Azoka y demás situaciones excepcionales). «Hasta ahora, el resto de años, se realizaban anualmente incluyendo a estos dos eventos un promedio de unas 2.500 horas extras. Además, estas horas están repartidas entre la plantilla de forma desigual: mientras este segundo delegado sindical tiene más de 180 horas extras, otros agentes no llegan a 30. Además, se pide a interinos continuamente cambios de horarios y turnos», subrayan.
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