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Pasión por el cicloturismo. Un grupo de vecinos decidieron crear la asociación Txirrindulari Elkartea hace 40 años, uniendo su pasión por la bicicleta, con el objetivo de apoyar la cantera y al deporte femenino.
«Recuerdo que a mí me liaron los de Iurreta porque estábamos metidos en el mundo del cicloturismo en el grupo de Castillo de Durango. Empezaron a crear unas estructuras deportivas de pueblo que agrupaba a diferentes disciplinas y nos incorporamos desde el principio», explica uno de sus miembros que pertenece al club desde sus inicios, Agus Ruiz.
Actualmente, la entidad cuenta con 234 socios y 49 de ellos son federados. «Había en Iurreta cierta tradición ciclista con los hermanos Barrutia y por el deseo de tener un grupo ciclista, se creó el colectivo destinado a la práctica del cicloturismo (andar en bici). Queríamos tratar de apoyar de alguna manera el ciclismo más desfavorecido o interesante: el ciclismo de escuelas como promoción y a las chicas», detalla.
Su hermano, Fernando recalca que el colectivo siempre tuvo como objetivo arraigarse en la localidad y apoyar a actividades sociales en el pueblo. Para conmemorar este aniversario, presentaron a los equipos en la plaza de San Migel el último domingo de febrero y luego hicieron una salida corta y lunch en algún bar del pueblo. «También estuvimos acompañados de animación, con el paso de trikitilaris, pasacalles, algunos fuimos en bici con la kalejira y terminamos todos en carpa. Además, también asistieron seis u ocho fundadores», subraya.
Precisamente, en el acta fundacional del club figuran nombres como Justo y Tomas Alberdi, Jabier y Julian Bilbao, Iñaki Etxebarria o Juan Angel Rekalde a los que esta directiva les brindará un homenaje a los fundadores del club, con la celebración de una comida y la entrega de un obsequio el próximo 30 de noviembre.
«No obstante, el mayor peso de las actividades es después del verano. En el programa de fiestas de San Miguel, hemos incluido una proyección de fotos de actividades realizadas desde 1984 o la marcha cicloturista retro por Iurreta, con la incorporación de bicicletas antiguas y material de hace 50 años. Además, su idea es conservarlo en la casa de cultura de Ibarretxe. Este domingo, a las 9.00 horas, realizarán una ofrenda al santuario de Dorleta con un maillot nuevo y especial conmemorativo de este aniversario. El próximo 25 de octubre, a las 19.00 horas, realizarán una charla con la presencia de varios ciclistas o exciclistas, a espera de confirmación, en la Casa de Cultura. Para concluir el año, realizarán una subida de 47 kilómetros a Urkiola el 31 de diciembre.
Uno de sus miembros, Juanjo Kortazar, recalca que lo mejor de todo son «las salidas que hacemos los fines de semana». «Te lo pasas bien, tomas un café y es lo que más me llena. Vamos entre 10 y 25 personas, según el tiempo que haga y de la motivación de cada uno. Entre los aficionados, estaba mi cuñado y a mí me encantaba el deporte. Empecé a salir con ellos y hoy en día, no puedo bajar de la bici. Es como una droga», detalla.
No obstante, desde la asociación se muestran preocupados por el relevo generacional. «Hemos ido dejando de hacer cosas por edad y responsabilidades. Somos bastante mayores, entre los 55 y 75 años», subraya Fernando. Juanjo y Agus Kortazar recalcan que hay más afición por la bicicleta y se ven cada vez más mujeres en la comarca. «No obstante, la gente joven no se implica en el voluntariado y así es difícil continuar», añade.
Durante muchos años, esta asociación organizó una carrera tan importante como la Emakumeen Bira, con la participación de las ciclistas más destacadas a nivel profesional. También, han organizado pruebas para escuelas de ciclismo, tanto en carretera como en la zona de Berezi, fomentando el cicloturismo.
«Los fundadores eran de Iurreta y querían participar en la vida social y aportar algo al pueblo desde su afición: el cicloturismo. En Iurreta, ha sido visible nuestro club. Sí, somos reconocidos en todo el pueblo y salimos todos los domingos desde la carpa de Askondo. Ahora, organizamos salidas y excursiones para nosotros», recalcan.
Aunque indican que el futuro es incierto, participan en pruebas como la famosa marcha de Jesús Loroño, Quebrantahuesos, Lagos de Covadonga o la famosa Luchon-Bayonne, siendo el club que más participantes ha llevado. «Hemos dado a conocer el nombre de Iurreta más allá de nuestras fronteras, siendo uno de los clubes que más participantes lleva», subraya Fernando.
«El efecto llamada es importante, hay que visibilizar el ciclismo femenino. Los clubes de ciclismo que se dedican a promocionar el cicloturismo, se dedican a promover la competición. Funcionan bien, tienen cantera, hay jóvenes pero los clubes antiguos como el de Iurreta, que ha superado la cantera, se han quedado en la práctica del cicloturismo, por el goce de andar en bicicleta», recalca Fernando, que junto a su hermano, anda en bici desde los 14 años.
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