La Diputación 'radiografía' el subsuelo de Artaza para preparar la obra del subfluvial

La Diputación está inmersa en estos momentos en la ejecución de los «trabajos complementarios de investigación geotécnica» en el entorno del parque de Artaza. El objetivo es contar con una 'radiografía' exacta del subsuelo de todo el entorno, sobre todo porque ahí se ubicarán los «emboquilles» (las bocas) de los futuros túneles bajo la ría en la Margen Derecha. «Queremos profundizar en el conocimiento de las características mecánicas del terreno porque además del arranque de los túneles, en esa zona se proyectan conexiones del tronco principal con diferentes ramales», explicaron fuentes forales.

En concreto, por el subsuelo de ese punto discurrirán varias galerías que conectarán el túnel principal del subfluvial con La Avanzada, la Avenida Zugazarte y el corredor de Uribe Kosta. «Estas conexiones de los túneles con los ramales de entrada y salida dan lugar a secciones en galerías de gran tamaño que precisan de una investigación geotécnica más profunda», añadieron.

En este sentido, equipos especializados están realizando una decena de sondeos en la zona del parque de Artaza, en Leioa. La previsión es que realicen una decena de perforaciones y medida docena de perfiles de geofísica que descenderán hasta 60 metros de profundidad para «definir con detalle la profundidad y características de la roca» en el que será un «punto crítico» de las futuras obras.

«Cada euro invertido en esta fase supone ahorrar miles en la fase de obras», indicó en su día Pradales. En concreto, la Diputación tiene previsto destinar 10,5 millones a la financiación de los estudios previos. Además de los sondeos que estos días están desarrollando en Artaza, se efectuarán otros 200 en todos los terrenos afectados por las obras, además de simulaciones de tráfico para recabar todo tipo de información de cómo está formado el subsuelo y qué tipo de materiales se van a encontrar cuando las tuneladoras empiecen a realizar su trabajo. De hecho, cuento finalicen todos estos trabajos geofísicos y los ingenieros tengan sobre la mesa los informes finales, se ultimarán los diseños exactos de las galerías a excavar y se podrá cerrar un plan de trabajo más concreto con unos plazos de ejecución más concreto.

Las previsiones que manejan en la Diputación es que todo el trabajo de ingeniería esté finalizado dentro de doce meses, en el verano de 2023, y que para 2024 las máquinas puedan empezar a trabajar. Cuatro años y 403 millones de euros después, allá por 2028, la nueva infraestructura podrá entrar en funcionamiento para dar servicio a 51.000 vehículos que en estos momentos recurren a Rontegi.