La Diputación duplica las plazas residenciales para menores con «problemas graves de conducta»

Lo ha hecho durante una interpelación a petición del Partido Popular, que quería saber qué va a hacer la entidad foral para atajar la «conflictividad» y «garantizar la protección» de estos chavales, «desprotegidos y vulnerables». El responsable del departamento ha precisado que, «desde 2011», funciona un recurso para atender a los jóvenes con peor comportamiento que cuenta con diez plazas y que, el pasado abril, se abrió un segundo con otras diez. «La memoria no lo menciona porque la memoria es de 2021, pero seguramente lo hará en la memoria del 2022», ha lanzado.

Murillo ha subrayado asimismo que la red de protección a la infancia «tiene todas las tipologías de centros de los que tenemos competencia para poner en marcha» de acuerdo al Real Decreto de 2008 que establece los recursos a impulsar. «Disponemos de centros generales, especializados, de apoyo intensivo a adolescentes con problemas de conducta y, un nivel adicional, de apoyo a adolescentes con graves problemas de conducta», ha detallado.

El diputado ha apelado a «no confundir» unos tipos de recursos con otros. «Nuestra red no tiene centros de internamiento, porque son dependientes de Justicia. No tenemos competencia para eso. Nosotros lo que hacemos es proteger a los menores, es apoyamos para crecer porque el contexto en el que lo vivían no era el mejor para hacerlo», ha señalado.

La juntera popular Esther Martínez ha lamentado que se insista en que «las cosas están bien», porque «no lo están». «Tenemos que ir un poco más allá y pensar por qué hay fugas y por qué hay desprotección y descontrol», ha emplazado. Ha insistido además en que «no es un problema de recursos», porque «solo en adolescentes y jóvenes migrantes se destina casi 16 millones de euros al acogimiento», y ha reclamado «más especialización».