Borrar
LUIS CALABOR
Cuando un desactivador me dio una paliza en Leioa

Cuando un desactivador me dio una paliza en Leioa

CALABOR: 40 AÑOS DE SUCESOS EN EL CORREO ·

En diciembre de 1989, una bomba de ETA destrozó las manos y la cara a un artificiero de la Policía Nacional. Su compañero, fuera de sí tras la explosión, descargó la tensión conmigo

Lunes, 3 de mayo 2021, 01:50

Los desactivadores siempre me han parecido los mejores profesionales de las fuerzas de seguridad. Las cosas se nos van olvidando y hoy, por mucho que ... nos esforcemos, nos cuesta asumir lo jodido que llegaba a ser ese trabajo en las peores épocas del terrorismo de ETA, cuando se producían atentados casi a diario: si no era un paquete, era un coche bomba, y los artificieros estaban allí, en primera fila, arriesgando la vida y más de una vez perdiéndola. Era asombroso verlos trabajar, con aquella serenidad y aquel aplomo, y además eran unos tíos superagradables en el trato, una gente estupenda. Uno podría preguntarse por qué se metían en eso en vez de dedicarse a ocupaciones menos expuestas, pero se notaba que lo vivían y que, en cierto modo, disfrutaban de ese reto que les planteaba cada nuevo artefacto. Lo triste es que los malos siempre iban por delante y podían montar una trampa, como hicieron en Zorroza en mayo de 1989, cuando mataron a un artificiero de la Ertzaintza y dos del Cuerpo Nacional de Policía.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Cuando un desactivador me dio una paliza en Leioa