Cuando ganar un partido te puede costar la vida

El español compartió con sus seguidores un tuit en el que aparecían dos tuits con las amenazas de un apostador: «Voy a matar a usted y a su familia. Voy a cortar sus gargantas y alimentarlos a usted y su familia. A continuación, voy a tomar un cuchillo sin filo y empujar en tus ojos». La cuenta 'amenazadora' se dedica en exclusiva a las apuestas en el tenis y tenía unos 40.000 seguidores, aunque tras las amenazas, el perfil de ese usuario fue eliminado inmediatamente. «Ya acostumbramos a recibir amenazas y mensajes de esto cuando se pierde pero hoy ganando tener que leer esto...» escribió el tenista español en el tuit que contenía las imágenes con los lamentables mensajes.

Cervantes llegaba al encuentro ante Zverev sin el cartel de favorito. La victoria del germano se pagaba a 1,20 por euro apostado, una cuota bastante baja debido al enorme favoritismo que le daban al germano. Sin embargo, ese partido podría haber formado parte de una apuesta combinada con otros encuentros para hacer mayor la cuota final.

Lamentablemente estos desagradables sucesos se están convirtiendo en algo habitual en los deportes. Muchos apostantes se juegan grandes cantidades de dinero en diferentes casas de apuestas y luego pagan su frustración con los deportistas a través de las redes sociales. De esa manera, demuestran la "valentía" que tienen, ya que se esconden en el anonimato para insultar a los protagonistas del mundo deportivo. El suceso que le ha tocado vivir a Íñigo Cervantes no es nuevo para un tenista español, ya que su compatriota Roberto Bautista también recibió amenazas. «Algún día va a suceder una desgracia por culpa de las apuestas. Yo llevé un mensaje a la comisaría, debido a que un tipo me escribió que tuviera cuidado al salir de casa y que me iba a colgar de un árbol» afirmo el tenista.

Según un informe de la Dirección General de Ordenación del Juego, las apuestas deportivas han sido la disciplina que más ha crecido en España en el ámbito del juego. Durante el pasado año el dinero movido por las apuestas llegó a los 3.041 millones de euros, lo que hace que sean muchas las personas que actualmente siguen los eventos deportivos por el hecho de apostar y no porque tengan un especial interés en ellos.

Con sospechas desde enero

A principios de años la 'BBC' y 'BuzzFeed News' hicieron público que tuvieron acceso a una investigación que demostraba que hubo amaños de partidos por apuestas, algunos de ellos en torneos de máximo nivel como Wimbledon, y que supuso un gran impacto en el tenis. De hecho, el informe realizado por la Unidad de Integridad del Tenis (TIU) apuntaba que durante la última década 16 jugadores que se encontraban entre los 50 mejores tenistas del mundo eran sospechosos de haber podido amañar algunos encuentros.

Se llegó a amenazar con que la investigación se haría pública, pero lo cierto es que los nombres de los implicados todavía no han visto la luz de manera oficial. Para lo que sí sirvió todo ese revuelo fue para que algunas de las voces con más peso en el tenis demostraran y confirmaran que habían recibido amenazas y propuestas para dejarse ganar. Novak Djokovic, número uno del mundo, desveló que le ofrecieron 200.000 dólares por perder: «No se acercaron a mí, sino a personas de mi entorno. Obviamente, dijimos inmediatamente que no». Nicolás Almagro también ofreció su opinión sobre esta polémica: «Me han llegado a decir que me partirían las piernas si no me dejaba perder, pero ni por un momento lo he pensado. Se trata de la limpieza del deporte y del pan de mis hijos. ¿Cual es la solución) Muy simple: suprimir las apuestas».

Ahora toca esperar para ver si esta nueva denuncia de Cervantes acaba con las amenazas a tenistas y permite controlar de alguna manera este tipo de apuestas. La honradez del tenis está en juego y no se deberían de ignorar estos sucesos.