«A veces creo que mi balonmano no encaja en Alemania»

«Nunca dejamos de creer y lo conseguimos». Lo dijo nada más acabar el partido en el Palau. ¿A qué le supo la clasificación para la Final Four?

No lo sé, pero fue muy bonito. Esta será mi quinta Final Four y todavía no he ganado ningún título.

¿Quinta y en blanco?

Sí, sí, y nunca he ganado nada. Lo que me haría gracia es ganar la Champions y no solo llegar a la Final Four. Ahora tendré otra oportunidad. Pero también es importante llegar porque una vez en Colonia puede pasar de todo. Es un fin de semana, hay que estar en las mejores condiciones porque todos los equipos son fuertes y muchas veces ha habido sorpresas.

Traían cinco goles de renta de Alemania. ¿Estaban convencidos de que sería suficiente?

Para nada. He jugado otras eliminatorias y he perdido por más de cinco. Me pasó con el Atlético precisamente contra el Barcelona. Es una renta buena, pero remontable. A partir de seis goles empieza a ser más difícil. No lo veía nada claro en el Palau y el Barça era el favorito. Dimos la cara, la cara buena del Kiel, y jugamos un encuentro muy serio. Creo que fuimos superiores en el cruce y que merecemos estar en la Final Four.

Hubo un momento en el que sufrían muchísimo el Barça se puso cinco arriba, pero entonces apareció usted con tres goles seguidos en los últimos cinco minutos y sostuvo al Kiel. ¿Sintió que debía tirar del carro, que era su momento?

Esas cosas suceden. Después de tanto esfuerzo no piensas con claridad y tampoco eres capaz de decir ahora o nunca. Antes del partido sí estaba concienciado de que si no salíamos al cien por cien nos podría pasar lo que nos pasó en el Atlético, que en el minuto 10 ya habíamos tirado la ventaja y el partido. Teníamos que empezar fuertes y sabíamos que la reacción del Barça llegaría. Y llegó. Ves lo que ocurre, ves a tus compañeros y ves que no estábamos atacando bien. Entonces me dije: 'Para que se la juegue otro, voy yo'. Y salió bien.

Y tanto que salió bien.

Fue una sensación especial porque lo hice en un sitio en el que había jugado varios años y siempre quieres ganar a tu exequipo. Y también fue especial porque había mucha familia y muchos amigos en las gradas.

En el sorteo de la Final Four celebrado el martes quedaron emparejados con el Veszprém. No se puede decir que tuvieron mucha suerte.

No tenía claro a quién quería en la semifinal. Si tuviera que hacer un resumen sería el siguiente: el PSG es el que cuenta con las mejores estrellas y si tiene un buen día te gana seguro; el Kielce, por plantilla, al igual que nosotros, lo tiene peor, pero en el banquillo está Talant (Dujshebaev), que prepara muy bien los partidos; y luego está el Vezsprém, que en los últimos años ha acariciado el título.

¿Qué es lo que destacaría principalmente de los húngaros?

Que tienen muy buenos jugadores, una plantilla compensada, todos los puestos cubiertos y mucha experiencia en las Final Four. El año pasado jugaron la final perdieron contra el Barça y creo que ahora son los favoritos. Espero que esta predicción no se cumpla.

Cambio de aires

La otra semifinal es PSG-Kielce. ¿Con quién preferiría enontrarse en una hipotética final?

Lo primero que me gustaría es jugar la primera semifinal. Llevo cuatro Final Four y siempre me ha tocado jugar la segunda. Parece una tontería, pero esas cuatro o cinco horas de recuperación significan mucho. De momento me conformaría con estar en la final, que sería la leche, y el rival... Sé que Talant preparará muy bien el partido contra el PSG y, en caso de pasar, no le daría tiempo a hacerlo tan bien contra nosotros. Preferiría al Kielce... Pero ahora solo pido jugar la primera semifinal.

Es la primera vez desde la inauguración del formato en 2010 que no habrá representación española entre los cuatro mejores de Europa. ¿Cómo lo valora?

Es verdad que anteriormente había al menos dos equipos españoles con posibilidades de acceder a la Final Four. Ahora mismo hay uno. Desde la desaparición del Atlético solo queda el Barcelona, y si falla te quedas en blanco. De siete ha estado en cinco y volverá a estar en los próximos años. Veremos cuánto tarda en aparecer otro club español con aspiraciones.

En Colonia se despedirá del Kiel porque a partir de la próxima temporada jugará en el Vardar. ¿Por qué ha decidido cambiar de aires y elegir al equipo macedonio?

Hay varios motivos. El más importante es el desgaste de la Bundesliga, que además se agudiza con el nuevo formato de la Champions. Lo que hace es que no llegues bien físicamente a determinados partidos y tampoco a la selección. Hay períodos en los que puedes estar mejor, pero luego arrastras molestias, lesiones... He visto a muchos compañeros lesionarse de gravedad y no quiero que me pase. Para evitar ese desgaste de más, ese extra, y llegar en mejores condiciones a la Final Four y a la selección había que dejar Alemania. Seguir en la selección también pasaba por dejar Alemania.

Continúe.

En Alemania también hay más partidos y, por tanto, menos tiempo para la recuperación, menos vacaciones, menos días con la familia. Y acabo de ser padre... Llevo bastantes años fuera de casa y si dispongo de una o dos semanas más de vacaciones lo agradezco. Además, ya he vivido la experiencia alemana y he visto sus cosas positivas y negativas. No es mal cambio (Macedonia), sobre todo si va a alargar mi carrera deportiva. Eso pasa por buscar un sitio en el que mi balonmano encaje mejor. A veces creo que en Alemania mi balonmano no ha sido bien interpretado o que no ha encajado bien. Creo que en el Vardar, por el entrenador que hay, será más fácil.

Coincidirá además con sus compañeros de la selección Arpad Sterbik, Álex Dujshebaev y Jorge Maqueda y, efectivamente, en el banquillo está Raúl González.

Sí, será algo más parecido a España, y también la forma de vivir. En el norte de Alemania la cultura es totalmente diferente y cuesta adaptarse a ella. Lo intentas, haces todo lo posible, pero no deja de ser complicado.

Las expectativas del Vardar son altas en la Champions.

Sí. Es un equipo con objetivos importantes. La Liga tiene la importancia que tiene, y también está la SEHA, que no está mal, pero el equipo está preparado para la Champions. Tendremos plantilla para luchar por entrar en la Final Four así que no bajo en cuanto al nivel deportivo.

Por cierto, se hace difícil pensar que en los Juegos de Río no estará España, campeona del mundo en 2013 y actual subcampeona de Europa.

Es muy raro y muy duro. Pienso en Río y me pongo de mala leche. En Brasil habrá muchas selecciones a las que hemos ganado siempre en los últimos años.

Antes de colgar las zapatillas, que aún falta, ¿le queda alguna cuenta pendiente que le gustaría saldar en la pista?

La Champions. Tantos años rozándola y todavía no tenerla... Cuando fiché por el Barça, la habían ganado el año anterior; luego fiché por el Ciudad Real, y la habían ganado el año anterior; luego fiché por el Hamburgo, y la habían ganado el año anterior. Mucha gente me va y me dice: '¿Tú cuántas tienes?'. Saben que he estado en varios campeones e Europa, pero no que no tengo ninguna. Así que es mi gran objetivo junto al de estar otra vez en las Olimpiadas. Tengo 29 años y espero llegar en condiciones para las próximas. Pero creo que los Juegos para conseguir algo histórico habrían sido estos de Río. Mejor no pensarlo que me pongo de mala leche.