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Rodrigo Errasti Mendiguren
Lunes, 7 de septiembre 2015, 19:18
Vicente del Bosque se presentó en la sala de prensa del National Arena Filip II Makdonski con su gesto clásico ante los medios. Aunque siempre trata de mantener una apariencia de que nada le incomoda, la realidad es que todo lo que rodea desde hace ... un tiempo a Gerard Piqué le incomoda. El salmantino, que siempre suele buscar mensajes optimistas y desdramatizadores, no entiende que un jugador de la selección esté constantemente en el ojo del huracán por asuntos extradeportivos. «No tengo miedo a nada, que se genere una corriente difícil de parar. Estamos en un equipo de fútbol y es algo que no debemos olvidar», afirmó.
Tras una breve charla con el traductor, sonrió y comenzó a responder las preguntas de los periodistas. «La experiencia nos dice que siempre hay algún motivo de discordia cuando no hay grandes cosas, siempre nos fijamos en pequeñas».
Después de los silbidos al central en León y en Oviedo, llegaron las preguntas sobre la salida nocturna del defensa junto a otros futbolistas por las calles de Gijón. El cuerpo técnico había concedido permiso a los jugadores, algunos realizaron una salida más breve y regresaron antes de las 04.30 horas, límite inicial que se habló una vez terminado el encuentro en el Carlos Tartiere. «Espero que se reconduzca, lleva partidos 70 oficiales con la absoluta y 30 con las inferiores con un comportamiento bueno», recordó.
Negó que el partido ante Inglaterra del 13 de noviembre se juegue en Alicante y no en Madrid por Piqué. «No puedo hablar de eso, pero que la posibilidad de que se jugara en Alicante era una realidad. Lo sé porque me lo habían comentado hace tiempo», explicó el seleccionador. «Esa nos es mi función, pero no evito hablar de cualquier caso. El presidente me preguntó si me gustaría y nada mas», cuando se le insistió que la Federación había llamado al Hércules el lunes por la mañana.
El preparador salmantino avanzó que tiene «pensado refrescar el equipo con cambios ante Macedonia porque los jugadores apenas han tenido tiempo para recuperar», pero añadió que no sabe aún cuántas variaciones. ««Hay que darle valor a la plantilla que tenemos, es oportuno que esa energía que nos van a dar los nuevos nos convertirá en un equipo fresco y activo. Todos pueden jugar con garantías. Así será contra Macedonia. Creo que no perdemos fuerza y energía con alguno nuevo. No os voy a decir el número pero sí que refrescaremos el equipo».
No quiso explicar si jugará David de Gea o seguirá Iker Casillas pero reiteró que «los porteros tienen nivel suficiente ser titulares con la selección. Si están aquí es porque pensamos que pueden jugar, no estarían aquí. Confiamos en todos y no jugamos en todos nuevos porque queremos mantener un bloque» antes de aclarar que «no se ha planteado seguir después de Francia 2016. «Acabo contrato en Francia 2016 y esperemos que sea el final», zanjó el seleccionador.
Del Bosque es consciente de que su equipo tendrá que buscar espacios ante una Macedonia que ha sufrido «un cambio importante, no sólo de organización y de seleccionador. Ha modificado varias cosas respecto al partido de la primera vuelta en Valencia», insistiendo en la importancia del partido. «Tengo la misma preocupación que el día de Eslovaquia, creerse que el enemigo es menor es cuando suceden las sorpresas. Sería una estupidez pensar eso si no ganamos los tres puntos. Es necesario ganar en Macedonia para darle valor a los tres puntos logrados en el Carlos Tartiere».
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