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Koldo Domínguez
Viernes, 10 de junio 2016, 20:12
El centro La Ola de la BBK en Sondika es cada día un bucólico remanso de paz donde reciben atención varias decenas de jóvenes con discapacidad intelectual. Amplios jardines, cuidado césped, frondosos árboles. Ni la cercana vía de Euskotren ni el corredor del ... Txorierri que encajonan su perímetro perturban la tranquilidad que buscan y necesitan esos chavales. Pero esta tarde su rutina ha saltado por los aires al ritmo de Amparo Sánchez, anteriormente conocida como Amparanoia, que quedará para la historia como la primera artista del Music Legends Festival.
Resultaba emocionante ver a esos mismos adolescentes bailar y disfrutar de la música de la cantante andaluza, mientras el público comenzaba a llegar al recinto. «Llevaban varios días con una expectación tremenda. Para ellos es muy bueno salir de la rutina y ver algo como esto», explica una de sus monitoras, Marije Otxoa, minutos antes de dar por concluida la jornada y que los chavales regresaran a sus casas.
Ellos fueron los primeros en comprobar lo acertado de montar un festival de música rock al aire libre en un paraje como ese. La persona que tuvo la idea puede considerarse un visionario. Un faraónico escenario de 12 metros de altura levantado en lo que habitualmente es el aparcamiento. Bares y carpas. Tiendas de merchandising. Baños. Mesas para comer. Jardines para relajarse entre concierto y concierto. Y todo en medio de la naturaleza a 8 minutos en coche desde el centro de Bilbao y con la parada del tren a 40 metros de la entrada.
Una coqueta sala de conciertos al aire libre donde poder contemplar a 'leyendas' del rock a 5 metros de distancia... y si uno quiere, hasta sentado. Esa imagen de aglomeraciones, barullo y follón no casa con este festival. Los organizadores han dispuesto 198 sillas junto al escenario para seguir las actuaciones más 'tranquilas', como la de David Lindley, que ha tomado el relevo a Amparo Sánchez por cierto, entre el público, los Corizonas y Elliott Murphy, que fueron los siguientes en comparecer, y el propio Graham Nash, una de las estrellas de la jornada de mañana.
Codillo y ensaladillas
Como define uno de los presentes, el Music Legends es «un BBK Live para talluditos». Por eso, en vez de katxis de kalimotxo, en la lista de precios de las bebidas destaca una amplia oferta de cervezas, 'marianitos', whisky, patxaran y gintonics. Y para comer, salchichas alemanas, pastel de carne con queso, codillo con choucrute y ensaladillas. «Hemos traído 800 kilos de salchichas. Este es un festival diferente con un ambiente diferente», argumenta Enrique Thate, responsable de todo el 'avituallamiento'.
La jornada de hoy concluirá a las 22.30 horas con Los Lobos, venidos desde Los Ángeles en exclusiva para su actuación. Y aunque la etiqueta de 'legends' implique per se tiempos pasados, entre el público se mezclarán las canas y calvas, con melenas femeninas y vigorosas cabelleras. Veteranos y jóvenes disfrutando juntos de la misma música. Del mismo festival.
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