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sergio llamas
Sábado, 25 de agosto 2018, 01:09
La Ertzaintza investiga el incendio que dejó dos coches calcinados en la madrugada de ayer, y causó importantes daños a otros dos en una calle anexa al Megapark de Barakaldo, detrás del Leroy Merlin. Junto a los coches afectados permanecía aparcado un camión de pequeño ... tamaño con las dos ventanillas rotas, y restos de los cristales esparcidos por el suelo. En su interior, junto al asiento del copiloto, había dos bidones con combustible, y los cables bajo el volante habían sido manipulados para tratar de hacer un 'puente'.
El lugar del incendio está muy próximo al hotel Puerta Bilbao. Al menos dos de los vehículos afectados por el fuego pertenecían a turistas que permanecían alojados allí. «Vine a las diez de la mañana para coger un jersey del coche y me lo encontré así», se lamentaba Rubén de la Iglesia, de Vigo, poco antes de que la grúa retirara el vehículo de su pareja, cuyo interior había quedado totalmente destrozado. «Al venir hacía aquí me llamó la atención un hombre que llevaba una matrícula bajo el brazo. Ahora sé que era de uno de los coches», explicó.
Una familia de Badajoz, que también se alojaba en el hotel baracaldés desde la noche anterior, se encontró con la misma escena. Su vehículo, un Volkswagen Passat del año 2.000, sufrió la mayor parte de los daños en el lado del copiloto, por lo que ellos pudieron recuperar algunas pertenencias de su interior. «Pensábamos estar hasta el lunes, pero al quemarnos el coche ahora ya no sabemos qué hacer», explicó Julia, la madre, que llamó a la Ertzaintza para poner una denuncia. Poco después se acercó una patrulla, que acercó a los afectados a la comisaría.
Los bomberos forales tardaron cerca de dos horas en extinguir el fuego, registrado a las dos de la madrugada. Además de los tres vehículos quemados junto al camión con las ventanillas rotas, también tuvieron que sofocar las llamas de un cuarto turismo aparcado a unos 300 metros de distancia.
El incendio de ayer en Barakaldo se produce un mes después de que otros dos coches ardieran en el mismo municipio en circunstancias sospechosas, y con media hora de diferencia entre ellos. El primer fuego afectó a un BMW pasadas las cuatro de la madrugada. El segundo, a un Seat Ibiza.
A estos daños se les suman los 11 coches que el jueves por la tarde aparecieron con todas las ruedas pinchadas en las proximidades del capo de fútbol de Trapagaran. Las grúas continuaban trasladando ayer los coches damnificados. Estos se encontraban repartidos por la calle Ramón Rubial y el parking cercano. Como resultado de la investigación llevada a cabo por la Policía Local del municipio minero, una persona ya ha sido imputada por este delito.
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