El Covid-19 merma el uso de las 'paradas nocturnas' de Bilbobus

Con la llegada de los meses de verano y la denominada 'nueva normalidad', el servicio de transporte urbano del Ayuntamiento de Bilbao, Bilbobus, ha retomado las 'paradas nocturnas a demanda', una opción que se creó por primera vez en julio de 2018 para dar seguridad a las mujeres de la villa y prevenir posibles ataques machistas e incluso agresiones sexuales. El servicio de Gautxori en el que se puede solicitar la medida, se suspendió el pasado mes de marzo a causa de la pandemia del coronavirus y el posterior confinamiento. Se restableció en julio, aunque con un menor horario. Al reducirse el ocio nocturno los autobuses transitarán los sábados por la noche desde las 22.30 horas hasta las 2.00 horas del día siguiente. Anteriormente los vehículos estaban en ruta hasta las 7.00 horas.

Precisamente, la merma de los horarios ha provocado que el número de mujeres que recurren a este servicio para acercarse a sus viviendas haya caído en picado. Durante el mes de julio, según datos facilitados por la propia compañía, únicamente fueron «nueve personas» las que requirieron a los conductores que les dejase en un punto ajeno al itinerario establecido.

Para hacerse una idea de lo que supone el dato basta con mirar la aceptación que tuvo el primer fin de semana en vigor de 2018, momento en el que se puso en marcha por primera vez. Entonces, a pesar de que la medida era reciente, ya 12 mujeres recurrieron a ella. También hay que ser conscientes que en la actualidad sin fiestas patronales en los distintos municipios vizcaínos y con el cierre temprano de la hostelería es imposible que las cifras alcancen las de ediciones anteriores.

Bilbao fue una de las primeras ciudades españolas que decidió poner en marcha las 'paradas nocturnas a demanda', seguía así la senda de la localidad gallega de Vigo que unos pocos meses antes, a comienzos de ese mismo año, hacía lo propio. La ciudad vizcaína incluso se adelantó con la decisión a otras urbes como Madrid y Salamanca que han esperado a 2020 para seguir los mismos pasos.

Bajarse en el lugar que decidan, más próximo a su vivienda, funciona en todas las líneas del servicio municipal de transporte bilbaíno, aunque será el conductor el que decida si es viable y se dan las condiciones de seguridad vial para parar el autobús. En todo caso, se parará en el punto más próximo y la mujer deberá abandonará el vehículo siempre por la puerta delantera.