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mirari artime
Jueves, 29 de octubre 2020
Lo que iba a ser una entrada de lo más rutinaria a Ondarroa por parte de uno de los pesqueros que se encontraban faenando en la zona se convirtió casi en una película de catástrofes por culpa del fuerte temporal que ha estado azotando ... durante toda la jornada la costa vizcaína. «Ahhhh, Dios mío, dios mío», gritaba uno de los marineros al ver que no podían controlar el barco que terminaba por impactar de lado contra una pared del puerto de la localidad vizcaína tras ser arrastrado por la enorme fuerza del mar, como se puede ver y escuchar en el vídeo que ilustra este artículo.
La unidad de la flota de bajura del Cantábrica se dirigía a refugiarse en el muelle de la localidad costera cuando ha sido prácticamente lanzado contra el malecón que frena las olas que superan los ocho metros. «Nos hemos pegado contra el muelle, vaya viaje nos ha pegado la ola. Ala, para casa«, se lamentaba uno de los tripulantes del barco. Aunque los marineros se han llevado un buen susto, no se han producido daños materiales.
Epsilon, el décimo huracán de la temporada (o la vigésimosexta tormenta tropical, según se mire) pierde fuelle a más 3.000 kilómetros de distancia, al sur de Groenlandia, pero ha dejado tras de sí una cola transformada en ciclogénesis explosiva y luego en intensa borrasca que azota a toda la fachada atlántica y que el miércoles ha entrado con fuerza en el mar Cantábrico. Al Golfo de Bizkaia no han llegado las abundantes lluvias caídas en otros puntos del litoral europeo, pero si una intensa marejada con olas especialmente fuertes que han llevado al Departamento de Seguridad del Gobierno vasco a activar la alerta naranja hasta que pase la pleamar de este jueves a las 15.20 horas por olas que puntualmente pueden superar los ocho metros de altura.
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La costa vasca lleva casi toda la semana soportando los envites de un mar encrespado con ondas de gran envergadura. De hecho, el meteorólogo de Euskalmet José Antonio Aranda ha reconocido que las del miércoles con la pleamar de las tres menos cuarto de la tarde «no han sido las más altas», con una altura media de 6,5 metros, pero si muy características del temporal.. «Son olas cargadas con mucha energía, mucha fuerza, porque vienen muy espaciadas entre sí, con hasta 22 segundos de separación». Eso significa, según explicaba, que vienen «de muy lejos», y que golpean con especial potencia en la costa. «Por eso cuando tienen más peligro de provocar daños es con la marea alta».
Con el paso de las horas, la envergadura del oleaje ha ido en aumento y, según la previsión de la Agencia Vasca de Meteorología, sus mayores efectos se han producido en la marea alta de esta pasada madrugada del jueves (a las 03.10 horas). Luego, ha descendido mucho el riesgo y por eso la alerta naranja se ha bajado también a aviso amarillo hasta las dos de la tarde, cuando de nuevo se ha elevado el nivel de peligro otra vez hasta las 19.00 horas.
En cuanto el Cantábrico enfile de nuevo hacia la bajamar, se desactivarán todos los avisos, porque la borrasca también tenderá a amainar. «Habrá cada vez menos oleaje». El tiempo en tierra también empezará a mejorar ostensiblemente. «En pocas horas subiremos tres grados de temperatura», ha asegurado el experto, que prevé que un jueves «agradable». Según Euskalmet, el ambiente a lo largo de esta jornada será «templado y soleado», con una máxima prevista de 22 grados en algunos puntos. El viento suave del sur y la brisa en la costa contribuirá a ello.
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