Reclaman más seguridad en los accesos a los colegios Allende Salazar y Seber Altube de Gernika

«En las horas de entrada y salida a las escuelas se llegan a concentrar hasta dos mil personas en espacios pequeños, sin cabida suficiente para todos y próximo a la travesía por donde muchas veces los vehículos circulan a mucha velocidad», asegura la madre de un alumno de seis años de la ikastola Seber Altube. «Tanto en las entradas al colegio por la mañana como en las salidas, por las tardes, se monta el caos, sobre todo los días de lluvia que cargamos con los paraguas», matiza la misma vecina de Gernika.

Las asociaciones de padres y madres de los dos centros educativos, de hecho, han detectado hasta siete «puntos negros» en los entornos por los que los escolares realizan sus desplazamientos urbanos para acudir a clase. «No somos expertos en urbanismo pero les hemos señalado a los representantes municipales los entornos en los que más gente se aglomera y en los que los pequeños se sienten más inseguros», apuntaron en la reunión mantenida ayer por la tarde con algunos de los representantes locales. «Esperamos que mejoren la movilidad en esas zonas para que no tengamos que lamentar disgustos con ningún niño», solicitaron, asimismo.

Los padres y madres de Allende Salazar y Seber Altube proponen entre otras soluciones para evitar peligros convertir la calle Zearreta en una vía de un solo sentido, al estilo del resto de travesías que recorren Gernika. «De esa manera se podría ampliar la acera de la calle para que los viandantes puedan andar más seguros», matizan.

En su posible mapa de alternativas señalan también desplazar la parada del autobús «a la altura del parque infantil para que los chavales puedan apearse y entrar al autobús por un espacio pintado de amarillo en su parte trasera», describen.

Asimismo, plantean instalar una nueva parada para el autobús escolar en la calle Fray Martin de Murua, «y eliminar los actuales aparcamientos ordenados en batería». En la misma calle se propone también cerrar el acceso a las viviendas del fondo y peatonalizar la calle en pendiente.

El plan de ideas que los padres y madres de los dos centros escolares han presentado ante el Ayuntamiento incluye, asimismo, «ampliar la anchura de los pasos de cebra que más gente utiliza en sus desplazamientos a las escuelas y pintarlos de rojo y blanco para obligar a los conductores a reducir la velocidad cuando lleguen a las proximidades de las centros».