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Infografía del aspecto que tendrá el nuevo ascensor de Kamiñazpi, en Ondarroa. O. U.
Las obras del nuevo ascensor de Ondarroa arrancan a mediados de mes

Las obras del nuevo ascensor de Ondarroa arrancan a mediados de mes

Tendrán un plazo de ejecución de seis meses y persiguen resolver los graves problemas de accesibilidad que afectan a más de cien familias

Mirari Artime

Lunes, 4 de noviembre 2024, 15:07

Las obras para dotar a la parte alta del barrio de Kamiñazpi de Ondarroa de un ascensor para resolver parte de los graves problemas de accesibilidad que afecta a más de un centenar de familias han comenzado la cuenta atrás.

En la última reunión celebrada con los vecinos, el Ayuntamiento ha comunicado el inicio de los trabajos para mediados de este mes, con un plazo de ejecución aproximado de medio año y un presupuesto económico de 700.000 euros.

Los trabajos, que provocarán afecciones al tráfico de la zona y obligarán a anular varias plazas de aparcamiento, se centrarán al principio en fijar las bases sobre la que se asentará la estructura, para posteriormente colocar el elevador y rematar la urbanización del entorno.

«Habrá momentos en los que parecerá que la intervención está paralizada, pero responderá a que se están ejecutando actuaciones que no son visibles», ha señalado la responsable del área municipal de Urbanismo, Irina Alkorta.

Expectantes

Los vecinos, por su parte, se muestran esperanzados y expectantes de que «por fin se convierta en realidad una reivindicación que llevamos décadas esperando a que se cumpla», han asegurado.

El elevador dispondrá de una entrada a la altura de la calle y realizará dos paradas hasta llegar a la zona más alta. En la segunda se conectará con una pasarela completamente horizontal que permitirá salvar las escaleras y acceder a los portales más alejados de la barriada.

«El ascensor será de cristal, aunque no en su totalidad para garantizar la seguridad de los usuarios que en caso de avería pueden sufrir altas temperaturas por acción del sol», han explicado. «La pasarela, por su parte, tendrá un suelo rugoso, para evitar caídas, y sujeción para dar más confianza a los mayores», detallan.

Además, de cara a mantener la privacidad de las viviendas más cercanas y al mismo tiempo minimizar su rechazo, el lateral más próximo a los pisos estará revestido con un material opaco.

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