«Después de 40 años, los clientes que vienen a la plaza son como de la familia»

Lea Artibai no quiere que que los tradicionales mercados de Markina, Ondarroa y Lekeitio pierdan su esencia. Antaño, su celebración semanal se convertía en todo un acontecimiento tanto para los baserritarras como para los vecinos al convertirse en un punto de encuentro donde socializar y llenar la cesta.

«Ahora, cada vez hay menos puestos porque el número de productores va bajando a toda velocidad», asegura Alejandro Arrieta, del caserío Xemein Gain donde cultiva frutas y hortalizas ecológicas que luego comercializa en la plaza, junto al frontón. «Lo que nos salva es la calidad del producto, la cercanía, el conocer a nuestros clientes por sus nombres y que últimamente venga gente joven, es esperanzador», indica desde su puesto junto al frontón de Markina.

El matrimonio formado por Fernando Dosantos y Arrate Hernando es de la misma opinión. «Antes lo que marcaba las ventas era el precio, ahora también se mira, pero se valoran mucho más otros aspectos como su frescura o los beneficios que esa fruta o verdura aporta», detalla Dosantos que desde detrás del mostrador ha sido testigo de los cambios de hábitos entre los consumidores.

«Llevamos 40 años viniendo todos los jueves, hemos conocido hasta cuatro generaciones de clientes que ya son como de la familia», manifiestan. «Ha habido años muy duros, de mucho bajón, pero parece que poco a poco vamos remontando sobre todo porque hay clientes jóvenes que hacen aquí la compra semanal», explican.

Precisamente, para premiar esa fidelidad y al mismo tiempo dinamizar las ventas, desde la Agencia de Desarrollo de Lea Artibai han decidido sortear mensualmente una cesta de productos Km0 entre todos los que realicen sus compras en las plazas de la comarca.

«Sabemos que se trata de una propuesta sencilla, pero sin dejar de lado grandes estrategias comerciales que también estamos analizando, es una manera de poner en valor y apoyar al sector, así como a los propios clientes», han indicado desde la entidad supramunicipal que ha presentado la campaña junto a responsables de los ayuntamientos afectados.

Los baserritarras serán los encargados de repartir los billetes en la citas semanales que celebran los jueves en Markina y los martes y sábados en el casco viejo de Ondarroa, el mismo día que también tiene lugar en Lekeitio. Las rifas se celebrarán el último fin de semana de cada mes.

«Tenemos un gran valor que debemos apoyar y cuidar porque somos de las pocas zonas de Bizkaia en la que aún se mantiene la celebración semanal de la plaza en tres de sus municipios», subrayan desde el órgano comarcal.

Otro de los clásicos de la plaza markinarra es el puesto de flores y plantas de Iñigo Martínez y Jaione Ormaza. «Siempre viene bien remar todos en la misma dirección», asegura. «Sobre todo para hacer frente a épocas más flojas como septiembre, un mes de transición hacia la mercancía de invierno», detalla. «Es un trabajo duro, con sus dificultades y temores, pero compensa por los clientes, porque le tomas el pulso a la vida diaria».

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